lunes, octubre 31, 2016

MILITARES PROCESADOS: USTEDES NI SE IMAGINAN.



Estimados adherentes:
Un grupo de procesados por supuestos delitos de derechos humanos, nos hace llegar el escrito adjunto, que interpreta fielmente el sentir de quienes caen en manos de jueces que fallan en estas causas.
Atte.
Plan Ahora 2016

Ustedes ni se imaginan
¡Vieran ustedes cómo han reclamado y siguen reclamando los candidatos y dirigentes de la llamada centro derecha!
Desde que los militares retirados resolvieron castigarlos restando sus votos a sus pretensiones, han reclamado, ya por más de siete años. Y todavía, la gran mayoría de ellos - salvo contadas excepciones - siguen convencidos que ellos son la solución para nuestro calvario, e insisten en que los apoyemos, ofreciendo hoy migajas que se les caen de la mesa.
No señores; Uds. ni se imaginan por lo hemos pasado y lo que hoy seguimos sufriendo.
Uds. no se imaginan lo que se siente cuando por vez primera llega a la casa una patrulla de la PDI, toca la puerta y entrega una citación para concurrir a declarar en la Brigada Investigadora de delitos contra los derechos humanos.
Uds. no se imaginan la tensión que se instala en el citado y en toda su familia, en espera del día en que deba concurrir. Muchas veces pasan varios días, semanas incluso, antes de que llegue el momento de presentarse en la casona de calle Condell o en una unidad policial de cualquier parte del país.
Uds. no se imaginan todo lo que pasa por la cabeza en los minutos u horas previas al inicio del interrogatorio mientras se espera en la salita del ingreso. Uds. no conocen el laberinto de ése lugar y la frialdad de los detectives.
Uds. no se imaginan cómo en la medida que avanza el interrogatorio se va descubriendo aquello que le había devanado los sesos por largos días e insomnes noches.
Uds. no se imaginan lo que se sorprende uno cuando al fin aparece entre las preguntas del detective, la razón del por qué uno está allí. Uds. no sospechan lo que se devela cuando uno cae en la cuenta de qué se trata.
Uds. no se imaginan que tras la aparente inocuidad de las preguntas, se esconde la perversión de una persecución implacable. Entonces empiezan a caer en la cuenta que ingresaron al circuito de la justicia tuerta. Y recuerdan lo que les dijo el abogado que consultaron. “No debiera pasarte nada…”
Uds. no sospechan lo que es sentirse en la indefensión más absoluta y en la casi certeza que si está siendo interrogado es porque algún testigo lo ubicó en el lugar de quizás qué hechos, en alguna de las destinaciones que debió cumplir.
Uds. no sospechan lo que viene a continuación. Eso de firmar una declaración policial ante la PDI y que formará parte de un informe al 2 juez de la causa, que recién se enteran, es sobre tal o cual caso y que no tiene procesados o peor, que ya está avanzada. Ya se ve Ud., en los siguientes días, ocupando una pieza de detención en una unidad militar, naval, aérea o de Carabineros, porque el Sr. juez ordenó su detención provisional.
Uds. no sospechan lo que se siente al abandonar la casona de Condell. Uds. no se imaginan la cara de angustia de la familia, que espera en casa nerviosa y rezando.
Uds. no sospechan, cuando a los pocos días o cuando ya ha pasado algún tiempo, ya calmados los nervios, suena su teléfono y ahora es un detective que debe notificarlo de una citación al despacho de alguno de los ministros en visita y le informa número de la causa, lugar, fecha y hora en que el magistrado lo espera.
Uds. no avizoran la carrera frenética por conseguir un abogado, pedir consejos, preparar las cosas en familia por si lo someten a proceso. Ver las cuentas, inventar algunas mentiras para los ancianos de la familia…
Uds. no pueden siquiera entender el tremendo balde de agua fría cuando el abogado recomendado les dice: “Mala cosa, el magistrado es cosa seria, tiene el récord de procesamientos y condenas… no escucha a nadie”
Y menos tienen idea de que cuando llega el día, el Sr. ministro ni levanta la cabeza cuando Ud. ingresa a su oficina y le espeta: ¡Siéntese! Uds. no sospechan cómo se escucha el tono acusatorio e intimidador del Sr. juez mientras formula preguntas que nadie te dijo que te haría.
Uds. no pueden sentir en un mínimo porcentaje cuando en la puerta de la oficina asoman un par de civiles que esperan que uno firme, para tomarlo y conducirlo a alguno de los lugares de reclusión que las FF.AA. y Carabineros tiene preparados para sus antiguos camaradas hoy procesados. Y entonces recuerda lo que le afirmaron sus amigos y camaradas en retiro conocidos: “de todos los que han sido sometidos a proceso, sólo un puñado zafa”, y recuerda también lo que dijo otro: “jamás uno de los abogados que patrocinan habitualmente a los nuestros, ha ganado un caso”.
Y listo.
 Uds. no imaginan lo que es ser subido a un automóvil al medio del asiento trasero, flanqueado por un par de soldados o carabineros de civil. Y llegar al lugar de reclusión. Uds. no se imaginan lo que viene. A uno le quitan el celular, lo recibe un joven oficial y le lee con tono funcionario el reglamento para los detenidos, lo conducen a una pieza que muestra en su aspecto y olor, que ya ha sido ocupada por decenas de camaradas en igual situación, olor a angustia y dolor.
Y menos se imaginan el llamado a la esposa para decirle que lo detuvieron. No, no se lo imaginan. Y rápidamente llegan sus familiares, unos a darle un abrazo, otros a tratar de hacerlo reír, otros les traen las sábanas, los útiles de aseo… Y comienzan las conversaciones con los que ya llevan tiempo allí.
Uds. no sospechan las cosas que se dicen, cunde el pesimismo, la realidad es más grande y peor que lo que Ud. había pensado.
Uds. no se imaginan cuando a tu lugar de trabajo llega la PDI y pregunta a viva voz por ti y a raíz de lo que se enteran tus compañeros de trabajo, esa empresa que pudo surgir gracias al gobierno militar, te hace llegar un sobre azul, condenándote anticipadamente a restringir tu nivel de vida y a innumerables privaciones a ti y tu familia.
Pero, aquí, la función dramática recién ha comenzado. Y ahora Ud. es el protagonista, el malo de la película, el que a partir de este procesamiento, merece el repudio ciudadano, el escarnio público que ya se ocuparán de incitar y alimentar los medios de comunicación social, todos en manos de la zurda. Uds. no se imaginan estar días y días, algunas veces meses, elevando papeles a la corte para que tenga la gracia de conceder la libertad bajo fianza. Uds. no han visto jamás a uno de los nuestros que no tiene una chaucha para pagar las exorbitantes cifras que les exigen y que debe pasar meses juntando la plata, dependiendo de la caridad de los amigos.
Y Uds. no sospechan tener que pasar días y días esperando que la corte le otorgue la salida y que no prevalezca esa estupidez de ser un peligro para la sociedad, como si Ud. fuera a salir a los 70 años a pegar balazos a diestra y siniestra.
Y llega el día en que regresa a su casa, cerca o muy lejos del que ahora es su dueño en el mundo terrenal, el que decidirá todo el resto de sus días en la tierra. Uds. no imaginan cómo todo se precipita, cómo todo hace que el mundo gire más rápido y que el día de la acusación se acerque a la velocidad de un rayo.
Uds. no sospechan todo lo que hay que hacer para enfrentar este período, Contactar y contratar abogados, reunir plata, vender bienes, firmar papeles, ir al notario, dar explicaciones y con dolor, ver amigos que se apartan, ver a tu mujer enfrentando sola esta tremenda desgracia. No, Uds. ni se lo imaginan.
Y llega el día en que lo carean, en que lo re interrogan, en que lo maltratan, en que lo llevan y lo traen hasta que llega la acusación. Y Uds. no sospechan lo que pasa en su alma cuando lo acusan de delitos que no ha cometido, con testigos falsos, fuera de la ley, del estado de derecho y siempre con fines perversos. Y menos se imaginan la pérdida de su trabajo, la persecución a su familia, el despido de sus hijos, el acoso a sus nietos, la funa a su hogar. Uds. no lo han sufrido. Y entonces llega el maldito día, ése día que trataron de alejar desde que lo acusaron: la condena en primera instancia. Leen el fallo del ministro instructor y no pueden creerlo. Están condenados y las posibilidades de revertirlo son casi inexistentes, así se le hace evidente al conocer las historias de tantos camaradas que han pasado por lo mismo.
 Uds. no se lo imaginan, jamás han sido procesados y condenados fuera de la ley. Sin embargo, uno se aferra a las últimas esperanzas, Leen y releen el fallo, buscan las ilegalidades, buscan los testimonios amañados, buscan las inconsistencias, escudriñan para encontrar el párrafo donde puede estar la llave. Uds. jamás han pasado por esto.
Claro, Uds. no sospechan las características de la espera que media entre el fallo del ministro y la segunda instancia. No han tenido que recusar abogados integrantes, no han estado fuera de la sala encargada mirando la tabla, la cara de los jueces, secretarios, abogados, querellantes, señoras que los miran con odio, periodistas al acecho. Y en sus casas no han estado sus esposas, hijos y nietos rezando un padrenuestro y muchas avemarías para pedir un milagro.
Uds., estimados señores políticos de centro derecha, no sospechan lo que sucede cuando sale el fallo de ésa sala. Las más de las veces confirmando o aumentando las penas aplicadas por el juez de primera instancia.
 Uds. no se imaginan cuando se debe concurrir a los Centros de Reinserción Social de Gendarmería o al Servicio Médico Legal, donde jóvenes sicólogos, siquiatras y asistentes sociales escudriñan toda tu vida e invaden físicamente la privacidad de tu hogar, para confirmar lo ya ordenado por el ministerio de justicia; que eres un peligro para la sociedad y asegurarse que cumplas la injusta condena en la cárcel, en vez cumplirla en libertad vigilada, además de filmar y posiblemente filtrar posteriormente tus testimonios, tal como se filtra en los inicios de las causas tu domicilio y lugar de trabajo desde los mismos expedientes, fotografiados por una pléyade de abogados de izquierda, posibilitando así, la ejecución de violentas e ilegales funas, a las que nadie les pone coto.
Para que intentamos describir a Uds. entonces el calvario final: la espera de los siempre inútiles recursos de casación, ésos que siempre no resultan. Y para qué les mencionamos lo que pasa cuando la conocida segunda sala nos dice que “no ha lugar” al recurso y con total desparpajo, aumenta condenas citando hasta el cansancio esa ilegalidad de los delitos de lesa humanidad y la ficción del secuestro permanente.
Uds. no sospechan qué es prepararse para el cumplimiento de la condena, vender la casa y el auto para pagar deudas, enfrentar la 5 depresión y la angustia propia y de los tuyos, firmar poderes, renunciar a la libertad.
Y después de todo esto, de esto que Uds. no imaginan y menos han sufrido; ¿Todavía se atreven a mirarnos feo si les decimos que no vamos a votar por ustedes?
¿Todavía incluso intentan quebrar nuestra unidad con promesas vanas e invitaciones a cenar?
¿Todavía exhiben como triunfos extraordinarios una declaración pública, una iniciativa parlamentaria sin respaldo suficiente o la concurrencia a una ceremonia religiosa?
Así es: no votamos por quienes nos abandonaron, por quienes miraron para el lado mientras nos perseguían y condenaban fuera de la ley, por quienes avalaron con silencio cómplice al Sr. Piñera, peor para la Familia Militar que los mismos comunistas. Y que no votaremos por quienes continúen mirando el cielo y menos por los que perseveren en la traición.
Son contados con los dedos los leales y preocupados, unos pocos los sinceros y otros - urgidos por la amenaza de perder votos - que se sumaron tímidamente a respaldar al menos a los camaradas más enfermos y ancianos.
Del resto, Uds. no se imaginan lo que pensamos.

En Santiago, a 27 de octubre de 2016 Un grupo de camaradas procesados.

domingo, octubre 30, 2016

JORGE SHARP: JALISCO NUNCA PIERDE.


“Y CUANDO pierde, arrebata”. Eugenio Rivera, en esta misma página, días atrás, lo destacaba: no se reconoce el fracaso que está facturando la abstención. Desde el día siguiente a la elección todos sacan cuentas dulces.
En las filas del progresismo tajante están especialmente eufóricos con ocasión del triunfo de Jorge Sharp en Valparaíso. Figura que presentan como “cara nueva, joven” que viene a “limpiar la política” de “ineptos, indecentes, corruptos, políticos de siempre”, promovido por un movimiento ciudadano de base auténtica (dicen). Un éxito mediático del que se ha hecho parte y eco hasta The Guardian (el diario tiene a corresponsal proclive viviendo en Chile).
Pero, veamos. ¿Joven y cara nueva? Sharp lleva 17 años, más de la mitad de su vida, y desde antes del Pingüinazo, siendo dirigente estudiantil y político, a tiempo casi completo (logró sacar su grado universitario y título profesional, felizmente). Podrá no ser parte de máquinas comunales, pero a las universitarias se las conoce todas.
Su supuesto apoyo “ciudadano” se parece demasiado a ese tipo de tejido y trama con que, por años, movimientos zurdistas en las universidades se han impuesto a gremiales y partidos, mientras el grueso del estudiantado hace de espectador. Que adicionalmente a sus federaciones, peñas y escuelas, se sirvan ahora de juntas vecinales, clubes deportivos, causas solidarias con sueldo, cafés y librerías alternativas, es señal que han estado escalando en la vida, diversificado su consumo, envejeciendo, no que se hayan renovado.
Su repertorio de consignas lo conocemos de memoria. Sharp, podrá no ser disc jockey, pero como cantante popular sigue pegado a frecuencias “retro”, onda “la Unidad Popular/ es para todo el que quiera/ Echaremos fuera al yanqui/ y su lenguaje siniestro// Con la Unidad Popular/ ahora somos gobierno”. Ya el intendente de Valparaíso le hizo saber que en Chile rigen leyes y que los alcaldes no están por sobre otras instancias de gobierno regional y central.
Tener a su favor sólo el 16% de los porteños con derecho a voto tampoco es como para sentirse fuera de serie. A Revolución Democrática, fuertes en Providencia y el Mineduc, y a los G 90 en La Moneda, también se les vio animosos alguna vez.
Pasa lo mismo con Podemos en España. Fenómenos así son parte del estancamiento político. Despotrican contra el gatopardismo, pero con el correr del tiempo terminan remedando lo que deprecian… ¿sin darse cuenta? Discutible. Se les elige y, sin embargo, no hacen sino constituirse en una fuerza política más, con su cuota de caudillismo y clientelismo local, de ahí que atraigan y susciten expectación. Proveen jugosas noticias. Siendo de izquierdas no tardan en apuñalarse: pasa con Errejón e Iglesias, con autonomismos locales y con federaciones estudiantiles de cuya mentalidad no siempre se jubila.
Mutaciones metamórficas, a no dudar, son cambios, pero puramente morfológicos. Sucede con larvas u orugas, no todas llegando a crisálidas; las hay también polillas, pestíferas.
Alfredo Jocelyn-Holt

viernes, octubre 28, 2016

ALEJANDRO GUILLIER, PURA IMAGEN.



El cambio en la proyección del senador Alejandro Guillier ha sido sorprendente. Si bien en la encuesta CEP era el político mejor evaluado, muy pocos contestaban que lo querían como el próximo presidente. Y buena evaluación, no es sinónimo de disposición a votar. Pero desde ese momento, en los sondeos alcanzó a Ricardo Lagos en las preferencias y tengo la impresión que ya lo puede haber superado, lo que se verá en los que siguen.
¿Qué justifica este súbito cambio? En realidad nada, porque nada conocemos de lo que haría como eventual presidente, ni para dónde van sus planteamientos. Son esas cosas que se justifican ante sí mismas: una encuesta muestra una posición prometedora, que se agita con la conveniente repercusión mediática y la candidatura aparece como servida.
Para algunos, como Camilo Escalona, el senador por Antofagasta es el nuevo ME-O, pero no parece ser así. Es más comparable al fenómeno que encumbró a la Presidenta Bachelet. Porque apareció súbitamente y por un golpe mediático. Y esto es importante recordarlo y aprender de la experiencia. En su momento llamó la atención que ella fuera nombrada ministra de Salud, porque no era muy conocida, lo que se debió más que nada a la necesidad de avanzar en “paridad de género” en el gobierno de Lagos. Su gestión no fue exitosa y pronto dejó ese cargo para asumir la cartera de Defensa. Fue aquí, en una inundación, que se subió a un blindado, con lo que parecía comandar las tropas de rescate, y la imagen la hizo imparable: la tuvimos electa de Presidenta por primera vez.
Esa primera administración no fue particularmente buena, pero la gente sintió que los había protegido de la crisis económica que se desató en el mundo en 2008, porque por consejo de su ministro de Hacienda había cuidado los recursos que había generado el súper ciclo de precios del cobre y hubo con qué resistir (todo esto se suele olvidar). Una paradoja: su verdadero éxito fue haber sido rigurosa en la gestión, y la gente la reeligió para algo que prometía y ha sido lo contrario. Una prueba que los chilenos no siempre votan con lógica. Pero ahora el resultado está a la vista y a los chilenos no les gusta (como si ellos no tuvieran nada que ver con haberla elegido) y los asesores de Palacio temen que el apoyo –que va en 15%– caiga a un dígito en cualquier momento.
El símil con Alejandro Guillier es evidente. ¿Cómo llegó a ser senador de un día para otro, si jamás había actuado en política? Por la imagen que confiere ser una figura de la TV. De ahí, otra imagen bien construida: la de un legislador ponderado y dispuesto a escuchar, como también a enmendar. Sólo una imagen, porque siempre ha votado a favor de las desastrosas reformas del gobierno y no ha sido un factor para limitarlas.
¿Tiene derecho a la duda –por así decirlo– que lo hará bien? Por cierto, la historia está plagada de desconocidos que lo hicieron bien. Pero los chilenos debemos aprender e ir más allá de la imagen. Exigir propuestas y explicaciones con cierto detalle. O sea, entrar a la sustancia, porque de lo contrario nuestro salto al desarrollo será otro mito nacional más.

Axel Buchheister.

miércoles, octubre 26, 2016

LA SONRISA DE PINOCHET.



A Pinochet no le bastó derrotar repetidamente a los comunistas mientras vivió, sigue haciéndolo después de muerto. Desde su tumba su sonrisa socarrona se burla de ellos y de su incompetencia.
El Gobierno Militar impidió que Allende y su Unidad Popular capturaran el poder para ejercerlo sine die.
Derrotó la “política de rebelión popular de masas” organizada por el Partido Comunista, la “Coordinadora Guerrillera Internacional” y su “Batallón América”, capturandole las armas en Carrizal Bajo.
Hizo fracasar la Operación Siglo XX - dirigida por Teillier- donde asesinaron a cinco de sus escoltas pero no pudieron matarlo a él, impidiendo de paso que el PC se rehabilitara- ante sus mandantes cubanos y soviéticos- por sus repetidos fiascos.
Pinochet hizo fracasar la estrategia del PC para derrocarlo mediante atentados terroristas y violentas “manifestaciones pacíficas” y al final los obligó a someterse a la estrategia política y “burguesa” de la Concertación.
Impuso una transición pactada que lo mantuvo a él al frente del Ejército durante los primeros años de la “vuelta a la democracia” y dejó como herencia su “modelo”, su Constitución; la economía de mercado, las AFP, las Isapres y las Universidades privadas, el código laboral, todos engendros que los comunistas odian a morir.
Les dio una paliza tras otra.
La Nueva Mayoría (NM) con la participación protagónica del PC -bajo el “liderazgo” de Bachelet-, llegó al poder con mayoría completa y total ambas cámaras.
Llegó con la pretensión de retro excavarlo todo. Sacar los cimientos del “modelo” de la dictadura y así, hacer de Chile una sociedad próspera, igualitaria, con movilidad social y con derechos sociales garantizados. Lejos de Pinochet y su herencia maldita.
El caballo de batalla de la NM para justificar sus acciones fue la eliminación de lo que consideraba la creciente desigualdad social y económica; la rígida estratificación social, y el desmantelamiento del sistema educativo que constituía una traba para lo anterior. La expresión “desigualdad” fue mencionado 41 veces en el Programa de la NM.
A tres años de gobierno el panorama no puede ser mas desolador. Los presuntos beneficiarios de la revolución no la aprecian en absoluto y la politización de la administración pública –puesta en manos de ineptos- nos muestra a diario un fracaso tras otro.
Sin la morigeración de la Democracia Cristiana, la izquierda dura mostró una irremediable incapacidad para gobernar.

La guinda de la torta es el resultado de la CASEN 2015 y de su análisis comparativo a lo largo de varios años. El trabajo del Dr. Claudio Sapelli, Ph.D., doctor en economía de la Universidad de Chicago y director del Instituto de Economía de la Universidad Católica, es lapidario.

“Durante las primeras décadas del siglo XX la distribución del ingreso estaba empeorando, en la segunda mitad del siglo hubo una reversión de esa tendencia. En ese proceso de mejoras, comparando la generación nacida en 1960 versus la generación nacida en 1985, la distribución del ingreso mejoró en ocho puntos. Si se compara con la generación de los 90 la mejora es de 20 puntos en el GINI. Hay una mejora de mayor magnitud entre la generación de los 80 y los 90’.
Es más que claro que el proceso de reducción de la desigualdad es mucho más fuerte de lo que se había detectado antes”.
Las políticas económicas del Gobierno Militar sentaron las bases para un veloz crecimiento económico. En esas condiciones, lo mas frecuente es que todos crezcan pero que los mejor educados lo hagan mas rápido y se produzca un deterioro de la igualdad y una crecimiento del índice GINI, pero en Chile no sucedió así, el GINI no disminuyó mucho, pero no creció.
A partir de 1985 la desigualdad comenzó a reducirse a medida que las nuevas generaciones, mejor educadas y con mayor acceso a la educación universitaria y técnica, fueron reemplazando a las generaciones mas viejas con menos educación y menores ingresos y el índice GINI comenzó a reducirse hasta bajar de 50 en la última CASEN.
Sin embargo, las políticas que afecten al crecimiento o al acceso o a la calidad de la educación, aumentarán la desigualdad y las políticas de la NM han sido muy efectivas en deteriorar ambos aspectos, lo que reducirá las posibilidades de seguir disminuyendo la desigualdad.
Una de las causas del movimiento de los “pingüinos” es un efecto colateral al que no estábamos acostumbrados: Así como los pobres pueden salir de la pobreza, otros pueden caer en ella y eso aumenta la incertidumbre. Por otro lado, al comienzo de la llegada de nuevas cohortes de profesionales graduados recientemente los primeros en llegar recibieron salarios muy buenos, que al seguir llegando profesionales, fueron disminuyendo ya que el mismo beneficio se distribuyó entre mas personas.
En palabras del Dr. Sapelli: “En buena parte la dinámica que se generó (en el movimiento “pingüino) tiene que ver con la creación de premios salariales para los que tenían  mayor educación por el alto crecimiento económico de Chile, en un contexto de escasez de profesionales. La gente vio esos premios y se sintió motivada para estudiar, pero este  mismo proceso de generar más profesionales afectó los premios salariales. Por eso la población se sintió estafada de alguna manera. Este proceso de que haya más profesionales es bueno porque antes había importantes premios salariales a los que accedían pocas personas, y después hay premios más chicos pero tienen acceso más personas”.
Conclusiones
1- Ha habido una mejora muy importante en la reducción de la desigualdad, pero la izquierda no la quiere ver.
2.- La realidad en temas de desigualdad en Chile es "para celebrar" y los datos son "inapelables".
3.- La tendencia del índice GINI a seguir disminuyendo no está garantizada. Sólo "en el mejor de los casos" las reformas del actual Gobierno no tendrán impacto en esta trayectoria, es mas probable que resulten contraproducentes. La izquierda “autoflagelante” es incompetente para gobernar, mucho menos de crear y distribuir riquezas.
4.- Las políticas económicas del Gobierno Militar fueron exitosas e hicieron crecer la economía en niveles nunca vistos en Chile. Este crecimiento fue para todos, pero las personas con mayor educación inicialmente crecieron mas.
5.- La política de educación del por el Gobierno Militar fue exitosa y se está reflejando en un acortamiento de la desigualdad, -derivado del crecimiento de la clase media y de sus mayores ingresos debidos su mejor educación-, ha medida que van reemplazando a las generaciones mas viejas y con menos educación.
6.- La sociedad chilena está transitando de una sociedad de proletarios de clase trabajadora a una de propietarios de clase media. La Nueva Mayoría sepultó una forma de entender y hacer política. Este es el resultado de las políticas del Gobierno Militar, y la mayor amenaza para su continuidad son las “reformas” de la Nueva Mayoría. Este cambio social significa la muerte del comunismo. La muy cacareada “mayoría sociológica” no existe.
La adopción por parte de Ricardo Lagos de su expresión “los señores políticos” debe haber regocijado a Pinochet y el espectáculo de Bachelet mostrando la desnudez intelectual y de gestión de la izquierda dura lo debe hacer sonreír con malicia
Hoy día, el único “triunfo” del comunismo es la continuación de la prisión de los militares en Punta Peuco, la exacción de ingentes cantidades de dinero en compensación por la muerte de sus deudos y la reversión de la dirección del “Ni perdón Ni olvido” que terminará reventándoles en la cara. En todo lo demás Pinochet los derrotó inapelable y reiteradamente.
Buen motivo para sonreír.

Fernando Thauby.

lunes, octubre 24, 2016

LA NUEVA MINORÍA.


Una derrota dura e inobjetable, que dejó a la centroderecha en una posición expectante y al oficialismo al borde del precipicio. En rigor, contra todos los pronósticos gubernamentales, Chile Vamos obtuvo al final más votos en alcaldes y en concejales, así como también un mayor porcentaje de población gobernada por autoridades del sector. A su vez, la Nueva Mayoría perdió las principales disputas emblemáticas de la Región Metropolitana, entre ellas, Santiago, Providencia, Maipú y La Reina. En paralelo, RN y la UDI se mantuvieron al frente como las colectividades más votadas, en un escenario global donde la abstención se alzó sobre un preocupante 65%.
El gobierno y la Nueva Mayoría fueron, sin duda, los grandes derrotados de la jornada, un día negro que se vio reflejado en el abatido semblante con que el ex Presidente Ricardo Lagos decidió ser el primero en salir a reconocer el fracaso. Un gesto que, de algún modo, resumió la proyección política de los números plasmados en las urnas y, sobre los cuales, se deberá empezar ahora a intentar recomponer un proyecto, una coalición y un estado de ánimo para encarar los desafíos que se inician, precisamente, a partir de estos resultados. Ricardo Lagos puso el rostro a una derrota en el mismo instante en que el ex Presidente Piñera vestía con su sonrisa la victoria de su coalición; dos gestos que fueron la simbología profunda de las condiciones en que los principales bloques políticos comenzarán a desplegarse hacia las elecciones presidencial y parlamentaria del próximo año.
La lógica indicaba que un gobierno cuya popularidad se ha movido durante este año en torno al 15-20% no podía salir airoso en una batalla electoral, pero dicha proyección fue constantemente desestimada por las autoridades y personeros del oficialismo. En los hechos, eso fue exactamente lo que ocurrió: la Nueva Mayoría terminó obteniendo una cifra cercana al 47% en concejales, de la población que fue a votar (un 35%), es decir, en torno a un 13% del total. Una cifra aún menor al 15% de apoyo que el gobierno tuvo en la última encuesta del CEP, y que fue desestimada y ridiculizada por el actual ministro del Interior.
En definitiva, el gobierno y la Nueva Mayoría vieron confirmadas en las urnas las altas cifras de rechazo a su gestión, que mes a mes y semana a semana el país viene constatando. Una impopularidad a la que se buscó negar relevancia, para insistir en un camino de reformas mal pensadas y peor implementadas. Al final del día, el oficialismo terminó de cosechar ayer las consecuencias de una larga y lenta siembra política, de su soberbia ideológica y el desprecio por el sentido común de los ciudadanos. Un resultado que tendrá poco tiempo para intentar revertir y, quizás lo más grave, para el que no parece tener ni el diseño ni la convicción unitaria que urgentemente necesita.
Max Colodro.

viernes, octubre 21, 2016

EL PEOR @ServelChile DE LA HISTORIA: ¡LLAMEN A LA OEA!


EL RECIENTE  desaguisado de las personas que fueron cambiadas arbitrariamente de lugar para votar va a ser no solamente un error más de tantos en la gestión pública, sino con secuelas complejas en nuestra credibilidad democrática.
El fracaso de un intento express de legislar por parte del comité político, que proponía, casi como broma de payaso asesino, votar en dos lugares distintos, hará más dramático los efectos del desastre.
En una columna reciente en El Dínamo,   Ernesto Evans culpa al Servel por no incorporar los cambios necesarios, siendo que hay en el mercado tecnologías biométricas suficientes que ahorrarían mucho dinero al fisco, y varios bochornos.
Pese a su autonomía, el Servel parece hoy mucho más atrasado que cuando era dependiente del Ministerio del Interior, como hizo ver en Twitter el exministro Jorge Burgos.
Y sin duda, mucho más propenso al mal del burócrata de ampararse en el oficio que culpa a un tercero, que aprovechar las atribuciones que le dio la ley para innovar en materia electoral.
Las réplicas empezarán en la noche de las elecciones, cuando todavía no se han enfriado las urnas, en aquellas comunas donde los resultados sean estrechos.
Las elecciones chilenas, a diferencia de los demás países latinoamericanos, e incluso desarrollados (recordar el caso de la elección Bush-Gore) se resuelve ese mismo día en las urnas y no después en los tribunales, aun cuando los resultados son estrechos.
Las excepciones han sido pocas y por ello memorables. La más reciente fue Ñuñoa, donde en la elección pasada Sabat mantuvo la alcaldía en tribunales, caso condimentado con una sospechosa negligencia del abogado enviado por el Partido Socialista a defender los votos de su candidata.
Con la incertidumbre en el padrón podemos tener, esa noche, decenas de Ñuñoa 2012 en los tribunales.  Cualquier elección a alcalde que se decida por pocos votos, podrá ser cuestionada por el perdedor, quien dirá, con justa razón, que el padrón que se designó no era el correcto, y que por tanto la elección está viciada. Podría pasar también en concejales, extendiendo el bucle de lo incierto ad infinitum.
Hay que recordar, además, que en estas elecciones funcionan por primera vez las reglas de financiamiento electoral y propaganda, que tienen que ser fiscalizadas por el mismo Servel. Una de las críticas al nuevo sistema es que no ha permitido conocer lo suficiente a los candidatos.
Quienes defienden los cambios, empezando por Eduardo Engel, plantean que es una campaña que debe basarse en el debate de ideas, en vez de palomas en las calles.
El sociólogo Niklas Luhmann planteaba que la comunicación es un acto complejo que debe superar varias improbabilidades. Una de ellas, que suele ser la más difícil, es la de llegar más allá de los presentes en el acto comunicativo. En esto, la publicidad y los planes de medios son los que permiten que el “debate de ideas” entre a todos los hogares, compitiendo con el detergente, la película que se estrena, la teleserie bíblica, entre otros tantos estímulos que recibe cualquier ciudadano. Si se restringe la publicidad, obviamente, será más difícil la difusión de las ideas.
Hemos sido, hasta ahora, un país tan ejemplar en materia electoral, que expertos chilenos suelen ser convocados como observadores en elecciones de otros países.
Quizá sea hora de asumir humildemente nuestra realidad, y llamar a la OEA para que nos mande observadores.
Carlos Correa.

jueves, octubre 20, 2016

UN CAMBIO DE GABINETE DESCONCERTANTE.

El gobierno transmite una confusa señal al dar la impresión de que está renunciando a hacer efectivas las responsabilidades y ordenar su agenda.


EN UNA escueta ceremonia en La Moneda, la Presidenta de la República anunció ayer su tercer cambio de gabinete, el que provocó un evidente desconcierto -incluso dentro de la propia Nueva Mayoría- por su escaso alcance y profundidad. La salida de la exministra de Justicia era un hecho esperable -tanto por los escándalos en el Sename como por el bochorno ocurrido en torno al padrón electoral-, si bien no deja de ser llamativo que haya sido la figura de Ricardo Lagos la que aceleró este cambio, al haber reclutado al exministro de Energía Máximo Pacheco para su equipo programático. El que La Moneda se haya visto en la necesidad de alterar sus planes ante la irrupción del expresidente es un hecho político en sí mismo, quien empieza a ocupar un lugar protagónico dentro del oficialismo.
Es un hecho que el factor detonante de este cambio de gabinete fue la presión insostenible que se había generado en el gobierno a raíz del escandaloso cambio de domicilio electoral que afecta a medio millón de ciudadanos, un hecho que pone en entredicho la confiabilidad del padrón electoral y que puede empañar gravemente los resultados de las elecciones municipales de este domingo. Un bochorno de esta naturaleza hacía imperioso cursar las responsabilidades administrativas y políticas del caso, que no se limitan solo al Ministerio de Justicia, si bien a esta repartición le cabía una cuota ineludible porque bajo su dependencia está el Registro Civil, donde tuvo su origen el cambio de domicilio electoral.
Era obvio para cualquier observador que la ministra de Justicia había perdido ya todo su capital político para el cargo, pero es también claro que la responsabilidad por el desaguisado se había ramificado al propio equipo político de La Moneda, el cual dio aquí renovadas muestras de su impericia. Solo así se explica su tardía reacción para salir al paso del escándalo electoral, presentando para estos efectos una “ley exprés” que carecía de votos suficientes y que más bien pretendía diluir su propia responsabilidad política en estos hechos. Aun cuando cabe valorar que la Presidenta de la República haya hecho finalmente efectiva una responsabilidad removiendo a la exministra, la magnitud del problema hacía también inevitable que se pagaran costos a un mayor nivel político, lo que inexplicablemente no ocurrió. En particular, para numerosos representantes de la Nueva Mayoría resultó una sorpresa que el ministro Secretario General de la Presidencia no haya sido removido, a quien culpan del desgaste que se ha producido en la relación del gobierno con los partidos del oficialismo y de la errática tramitación de proyectos de ley relevantes.
Es una señal lamentable que la responsabilidad haya terminado acotándose únicamente en la cartera de Justicia, porque con ello se da la impresión de que La Moneda no ha terminado de calibrar el daño que le provoca al país el desprestigio y pérdida de confianza hacia las instituciones del Estado. No cabe entonces asumir este cambio ministerial como un reconocimiento del profundo error en que se ha incurrido -es apenas un mínimo-, y es inevitable preguntarse por qué el gobierno no aprovechó esta instancia para haber activado cambios más profundos, habida cuenta del sinnúmero de tropiezos de su equipo político. Una administración que aparentemente decide renunciar a su obligación de sancionar errores y ordenar su propia gestión parece sugerir que ha optado por replegarse, lo que transmite confusión y desconcierto.

Editorial La Tercera.

martes, octubre 18, 2016

BOCHORNOSO DESAGUISADO CON PADRÓN ELECTORAL.


Las diferencias entre el Registro Civil y el Servel son una nueva muestra de la preocupante incapacidad del Estado para ejecutar sus tareas.

RESTAN APENAS seis días para las elecciones municipales, y el país asiste a la bochornosa situación de que el padrón electoral presenta gruesos errores que podrían enlodar los resultados. Hay casi medio millón de electores que fueron cambiados de domicilio electoral sin su consentimiento, y de tal desaguisado se culpan mutuamente el Registro Civil y el Servicio Electoral (Servel), lo que ha motivado que tanto la Contraloría como el Ministerio Público hayan comenzado a investigar los hechos, ya sea para determinar eventuales faltas administrativas o para pesquisar posibles delitos.
Se están improvisando soluciones de emergencia -por de pronto la tramitación de una “ley express”, que dé a los afectados la posibilidad de votar indistintamente ya sea en su antiguo o en el nuevo domicilio electoral-, pero ninguna de ellas será enteramente satisfactoria, no solo porque hay un evidente riesgo de que la elección en aquellas comunas con mayor alteración del padrón se vea enturbiada, sino también porque se profundiza la desconfianza y el desinterés por participar en la vida cívica.
Se trata de otra falla ominosa por parte del Estado, que está dando reiteradas muestras de una preocupante incapacidad para gestionar apropiadamente aquellos servicios y tareas que le son propios, con el agravante de que ninguna autoridad parece estar dispuesta a asumir la responsabilidad de tales desaguisados. Así ha ocurrido con la tragedia de cientos de menores fallecidos en dependencias del Sename -entidad que depende del Ministerio de Justicia, al igual que el Registro Civil-; con las desprolijidades en la tramitación de la reforma educacional y la gratuidad; con las inadvertidas pensiones millonarias cursadas en servicios como Gendarmería; con la crisis en los servicios de salud y los hospitales inconclusos; con la reforma tributaria, que hubo de ser modificada y que aún no termina de clarificarse; en fin, el listado es extenso y el patrón de incompetencia de la gestión estatal es manifiesto.
Es insólito que dos servicios del Estado se culpen por lo sucedido con el padrón electoral, pero a la vez resulta inexcusable que el Servicio Electoral, habiendo recibido reiteradas señales de que se estaba produciendo esta anomalía, tuvo un actuar poco enérgico y no parece haber mostrado mayor dedicación para asegurar la impecabilidad del padrón electoral. Tras la consagración del voto voluntario, fue evidente que en su nueva confección este contenía fallas -como por ejemplo personas fallecidas o de muy avanzada edad-, las que no fueron corregidas, agravadas ahora por este inesperado cambio de domicilio. Es lamentable que una entidad que goza de autonomía constitucional, dotada de un consejo directivo plural y de mayor capacidad presupuestaria y logística que el antiguo Servel, aún no logre confeccionar un padrón plenamente depurado.
Es evidente que las autoridades de gobierno y del Servel se tomaron inicialmente con ligereza el cambio de domicilio electoral, y contra el tiempo se busca ahora tramitar una ley que corrija transitoriamente la situación, no sin riesgo de que pueda haber duplicación de votos u otras anomalías. Las responsabilidades del caso habrán de hacerse efectivas, porque de lo contrario el Estado no asumirá las consecuencias de sus propios errores, y le cabe al gobierno y al Servel dar garantías de que para la elección de 2017 no habrá nuevas fallas.
Editorial La Tercera.

domingo, octubre 16, 2016

LA OLLA DE GRILLOS DEL PARTIDO SOCIALISTA.


Toda la disputa de poder y reacomodos internos, en el socialismo tienen un objetivo a mediano plazo, que es la definición de la sucesión de Allende a la cabeza del PS. Un tema no menor, porque será esa persona la que dirigirá las riendas de la colectividad en plena campaña parlamentaria, en la discusión programática de un próximo Gobierno y la definición de la candidatura presidencial de la Nueva Mayoría.



Ya nada es lo que era. Los tradicionales lotes del PS como se conocieron hasta hace poco, los vínculos políticos entre liderazgos emblemáticos, la hegemonía de la Nueva Izquierda por sobre todo el resto del socialismo, todo eso ha cambiado, todo está revuelto. La correlación de fuerzas internas se está rearmando, todo en el marco de un vacío en la conducción política de la colectividad ante la cuestionada gestión de la mesa directiva que encabeza la senadora Isabel Allende y, con el desafío ad portas de sortear 18 meses clave en materia electoral, programática y de definiciones con miras a las presidenciales del próximo año.
A principios de septiembre comenzó a circular en el PS un documento político en el partido, gestionado por el presidente de la Cámara Baja, Osvaldo Andrade, y un día antes del Consejo General de la colectividad, fijado para el sábado 10 de septiembre, estratégicamente el diputado PS puso el texto sobre la mesa de los socialistas acompañado del respaldo de más de 900 firmas de militantes, dirigentes comunales y regionales del partido, más las del senador Alfonso de Urresti y siete de los 16 diputados de la bancada, entre ellos Manuel Monsalve y Maya Fernández Allende, la sobrina de la timonel PS.
Rápidamente los aliados de Andrade comenzaron a hablar del texto como un acto fundacional de un nuevo orden interno en el PS, de una nueva correlación de fuerzas, en el entendido de que el mítico diputado PS hace un par de meses que ha recorrido varias regiones del país contactándose con las bases de la colectividad y que el 20 de julio formalizó su decisión de abandonar su “lote” histórico, la Nueva izquierda, del que fue siempre uno de sus máximos exponentes.
Decisión que, de paso, significó el quiebre irreversible con su aliado político de toda la vida, el ex senador Camilo Escalona. Una decisión que se vio agudizada y acelerada con la guerra civil interna que provocó el episodio de la cuestionada pensión de cinco millones de pesos de Myriam Olate, la ex mujer de Andrade, lo que sirvió para que los adversarios del ex timonel le pasaran un talonario completo de facturas políticas, con críticas públicas a la situación y pasando a Olate al Tribunal Supremo del partido.
Con igual rapidez, los detractores de Andrade desde otras corrientes socialistas, como el tercerismo, aliados de Allende o cercanos al ministro de la Segegob, Marcelo Díaz –cuyo grupo se reunió el miércoles en la noche precisamente a analizar la situación interna del partido–, salieron a negar cualquier impacto real del documento “El PS Frente al Chile de Hoy”, asegurando que estaba “inflado” y que no existía un nuevo orden en el partido.
“Es un intento de Andrade por armar un nuevo lote, es un intento de reagrupamiento, pero que no va a prosperar mucho por ahora, hasta que no decante el tema presidencial del 2017. Cualquier intento antes de eso es estéril”, afirmó un ex asesor de Gobierno y cercano a Allende.
Los críticos dirigieron sus dardos especialmente a cuestionar a los firmantes del texto, que muchos no habían sido consultados, que había molestia porque se usaron sus nombres, que no es lo mismo adherir a un documento político que adscribir a un liderazgo político puntual.
En el seno del PS aseguraron que el documento de Andrade no es punto de inflexión en el orden interno, sino que una consecuencia de cambios que se vienen produciendo hace meses: la decisión de un sector de la Nueva Izquierda el año pasado de no apoyar a Escalona y jugarse por el triunfo de Allende, el distanciamiento del ex senador con su otrora brazo derecho, Andrade, y el quiebre que se habría registrado también al interior de la corriente Grandes Alamedas, puntualmente entre la diputada Fernández y otro de sus exponentes clave, Andrés Santander, director del Fosis, pero por sobre todo estrecho colaborador de la timonel socialista.
El quiebre entre ambos cercanos a Allende partió –explicaron en el PS– en las internas para elegir nueva directiva de la Juventud Socialista hace más de tres meses, donde Fernández y Santander –siendo del mismo lote– apoyaron a candidatos distintos, disputa de liderazgos que traspasó las fronteras de la JS, se extrapoló al resto del partido y que está vigente hasta hoy. “El eje importante en el reordenamiento que está empezando en el partido es el quiebre de las Grandes Alamedas. Eso generó el inicio de los movimientos internos”, precisó un asesor gubernamental PS.
En esa tensión estaría buena parte de la explicación de por qué la sobrina de la senadora Allende aparece firmando el documento de Andrade, en un gesto de alineación política con el diputado que no pasó para nada inadvertido en el entorno de la presidenta socialista. Es más, la semana pasada se comentó en distintas instancias del partido que el entorno de la timonel le habría hecho ver a Fernández lo errado de su decisión y cómo eso perjudica el liderazgo de su tía, la que tiene por delante la tarea de convencer a las huestes socialistas de que es una carta presidencial viable y mejor que Ricardo Lagos Escobar o el senador Alejandro Guillier.
En el PS dicen que el documento de Andrade le cayó como piedra a Escalona y que, por lo mismo, el actual vicepresidente de la tienda y sus cercanos han desplegado una intensa estrategia entre la Nueva Izquierda para evitar posibles fugas. Más aún cuando la semana pasada en la colectividad se comentaba que se estaba cuajando otra lista de unos 300 nuevos adherentes al documento de Andrade, que se sumarían a los 900 que ya firmaron.
"Nadie ha cuestionado el contenido político del documento. Siguen pendientes del número de los firmantes. Eso es una demostración de lo demoledora que fue la puesta en escena de este documento que plantea una demanda de conducción política del PS", sentenció uno de los cercanos a Andrade y firmante del texto político.
Toda esta diputa de poder y reacomodos internos en el socialismo tiene un objetivo a mediano plazo, que es la definición de la sucesión de Allende a la cabeza del PS. Un tema no menor, porque será esa persona la que dirigirá las riendas de la colectividad en plena campaña parlamentaria, en la discusión programática de un próximo Gobierno y la definición de la candidatura presidencial de la Nueva Mayoría.
Se sabe que Andrade busca regresar a la presidencia del partido, que por lo mismo el sector de Allende y el tercerismo se unieron y tienen como carta al ex ministro Álvaro Elizalde, quien también podría contar con la venia de Escalona y parte de la Nueva Izquierda, para neutralizar al actual presidente de la Cámara Baja y que, en este cuadro, por ahora el ministro Díaz –quien tendría cierta distancia con su antecesor de la Segegob– y su “lote” se están aliando con la diputada Fernández, la que está en disputa con Santander.
“Hay tres rivalidades grandes en estos momentos en el PS que están definiendo todos los reacomodos de lotes y fuerzas: la de Andrade con Escalona, la de Díaz con Elizalde y la de Fernández con Santander, esas pugnas son las que chocarán los próximos meses”, explicó un alto asesor de Gobierno PS. Como dice un antiguo dicho, la situación interna en el PS está más enredada que moño de vieja.

El síndrome

El sábado 17 de septiembre, en una columna en La Tercera, el jefe de campaña de Ricardo Lagos en las elecciones de 1999, el DC Genaro Arriagada, apuntó precisamente a la tensión interna del PS, de cómo esto puede complicar la definición de la carta presidencial para el 2017 y del riesgo de ser afectados nuevamente por el “síndrome socialista”, rememorando el episodio del comité central de 1969, cuando a pesar de que Salvador Allende era la carta más potente de la izquierda en ese momento, no era del gusto de la dirigencia PS, la que se negaba a nominarlo, lo que finalmente se logró solo gracias a que, de los 31 miembros de esa instancia resolutiva, 13 se abstuvieron y primó el voto de los otros 12.
Así, Arriagada advirtió del peligro que los “lotes” internos del PS se embarquen en una apuesta presidencial sin ver más allá de los intereses de su facción, hipotecando, de paso, el futuro de la coalición.
"En su ceguera, piensan que el comité central de 107 miembros, dividido en cinco corrientes, donde ninguna tiene más de 30 votos, posee la llave que abre las puertas de La Moneda. Deciden no apoyar a Lagos, que suponemos ya ha sido proclamado por el PPD, quien, con razón, dado que no están las condiciones para su candidatura, se retira de la contienda (…) le agregan ahora un sistema de nominación de su abanderado plagado de errores. La irresponsabilidad encuentra su más reciente excusa. Los dirigentes políticos pueden enfrascarse en una lucha de rencores y descalificaciones (incluidas alusiones a O'Higgins), caer en el desvarío de que en una reunión de cien personas pueden decidir la historia y todo ello sin preocuparse, pues luego una ‘primaria vinculante’ –su más reciente fe– como una pócima milagrosa, vendrá a sanar todas las heridas, a soldar todas las fracturas, a perdonar todos los agravios y a lograr la unidad que ellos, por años, se esmeraron en destruir. Nada de qué preocuparse en esta política de tiempos revueltos", señaló.
En el entorno de Andrade dicen que la apuesta del documento es precisamente evitar esa lucha de lotes e instalar una nueva lógica interna en el partido, cuya columna vertebral no sea la Nueva Izquierda, como sucedió hasta hace poco, sino que una “nueva transversalidad política”, una nueva base con militantes de todos los sectores que dé solvencia para enfrentare el próximo período de desafíos electorales y políticos.
Se ponen el parche antes de la herida y aseguran que, por ahora, no hablan de ser una nueva tendencia interna –aunque sí reconocen que aspiran a ello a futuro–, pero que sí son “una reflexión colectiva, una construcción de vínculos y una adhesión a un tipo de acción, a una línea de conducta”, ante el vacío de liderazgo político que atraviesa la colectividad. “Lo que se busca es recuperar la sensatez socialista, que surja una masa crítica liderada desde el PS para enfrentar la crisis de confianza que hay hacia la política”, agregó uno de los firmantes del documento.
Precisamente ese es uno de los puntos claves del texto. "Muchos de nuestros compatriotas ven nuestro orden social como hostil, injusto e indolente ante las necesidades básicas de: trabajo digno, salud oportuna, educación de calidad, pensiones justas y seguridad pública, en definitiva una percepción de desprotección de derechos sociales. Lo anterior se ve agravado ante el enriquecimiento, con dineros de los trabajadores, de las grandes corporaciones que proveen los servicios públicos de salud, previsión y educación, y por la constatación de la cooptación que estas corporaciones han hecho de un puñado de representantes políticos", expresa el documento y propone –junto con comprometerse a respaldar a un abanderado presidencial único de la Nueva Mayoría– "impulsar una agresiva agenda pro transparencia", para que "en los próximos eventos electorales el PS no patrocine candidatura de ningún militante o no militante que esté vinculado a procesos de corrupción, sin importar el estado de la causa judicial".
Marcela Jiménez.

jueves, octubre 13, 2016

SOY DEL SÍ Y VOTARÉ SÓLO POR LOS DEL SÍ.



La derecha está deshecha, valga la consonancia. Yo soy de derecha a secas y ya no tengo partido al cual adherir. ¿Qué es ser de derecha? Ser conservador en lo valórico y liberal en lo socio-económico. Leer “La Fatal Arrogancia”, de Hayek, y estar de acuerdo en todo. Nunca creer que el Estado es la solución, pues casi siempre es el problema. (Mire usted el Sename.) Creer, en cambio, que la libertad de iniciativa es siempre la solución. Claro, como dijo un juez norteamericano en una sentencia, “mi libertad para blandir el puño termina antes de tocar la barbilla de mi vecino”. Es decir, creer en la ley y el orden. Como dice el único pre-candidato presidencial del “Sí” que hay actualmente, José Antonio Kast, lo primero que se debe hacer en la Araucanía es decretar el estado de emergencia y mandar carabineros y militares a restablecer el estado de derecho. 
 
           Recuérdese que en marzo de 1990 no existía el “problema mapuche” y tanto era así que en el plebiscito de 1988 el “Sí” ganó en la Araucanía, y la Junta de Caciques le dio un pergamino a Pinochet designándolo “Gran Conductor y Guía” (“Ullmen F’ta Lonko”). El “conflicto mapuche” lo crearon después el Estado y los gobiernos del “No”. Por tanto, ni el uno ni los otros lo van a resolver jamás. Como tampoco el problema del Sename, acerca del cual lo más acertado que se ha escrito en estos días es obra de Luis Larraín en “El Mercurio” del sábado, ya reproducido en este blog y que merece volver a reproducirse: “Porque el Sename es una institución cuyo principal objetivo es satisfacer las expectativas laborales de los más de 4.500 funcionarios que trabajan en él y sus centros de atención directa. Esa es la preocupación esencial del Gobierno en relación a ese servicio y si alguien le dice otra cosa, miente”.
 
          Ser de derecha, junto con implicar no identificarse con ningún partido entre los actuales, todos del “No”, es adherir indubitablemente al “Sí” al Gobierno Militar, que salvó a Chile del peor totalitarismo de nuestro tiempo y lo puso a la cabeza del progreso en América Latina, sacándolo del último lugar en que lo dejó el gobierno marxista. Porque la derecha estuvo con y en aquel gobierno y lo inspiró con sus ideas, gracias a lo cual fue exitoso y pudo proclamar, al final, “Misión Cumplida”.
 
         ¿Qué se hizo el 43 por ciento del “Sí” del plebiscito? “Qué se fizo el Rey don Juan?/ Los infantes de Aragón ¿qué se fizieron?” Yo les voy a decir, reproduciendo una pregunta y una respuesta de uno que fue del “Sí”, pero ya no lo es, Harold Mayne-Nicholls, entrevistado por Felipe Bianchi en “La Tercera”:
 
          Pregunta: “¿Es cierto que Ud. Votó por el “Sí” en el plebiscito del 89 (sic)?” Respuesta: “La historia me enrostra a diario ese grave error. Por eso voto en cada elección. Aprendí, con hechos, el valor de preservar la democracia”.
 
          A eso han quedado reducidos casi todos los del “Sí”. Cerebros lavados, tienen que complacer a los del “No”, que a estas alturas son casi todos y que nunca han sabido de lo que están hablando, pero mandan en Chile (léase mi blog precedente, “Han Hecho Lo Que Han Querido”).
 
          Pues votar “Sí” en 1988 y ganar significaba tener la misma democracia que tuvimos a partir del 11 de marzo de 1990, habiendo ganado el “No”, pero un año antes, pues se habría restablecido la plena democracia el 11 de marzo de 1989. En lo demás, habría sido exactamente igual, con Congreso elegido, más seis senadores designados entre personas de larga trayectoria, pero con otro Presidente y otro gobierno, mejor, por cierto, que el de Aylwin: el de Augusto Pinochet y su equipo. Éstos hicieron crecer a la economía chilena en más de diez por ciento en 1989, reduciendo el desempleo a 5 por ciento, materializando lo que el resto del mundo llamaba “el milagro chileno” y, por cierto, habrían seguido dando la felicidad al pueblo mapuche de la Araucanía, donde reinaban la ley y el orden y no existía el “conflicto mapuche”, creado por Aylwin y sus sucesores, incluido Piñera, el del V Gobierno de la Concertación.
 
          ¿Qué le ha pasado a Mayne-Nicholls, entonces? Lo  mismo que a casi todos los demás chilenos: le han “lavado el cerebro”. La izquierda lo hace repetir todas sus frases hechas. Ahora es un hombre del “No”. Pero por lo menos conserva una virtud: todavía dice la verdad, porque otro no habría reconocido haber votado “Sí”. Como es honesto, yo lo defendí cuando Piñera conspiró contra él, desde la Presidencia, para sacarlo de la ANFP, defendiendo su interés como controlador de Blanco y Negro. Al final logró defenestrarlo, para poner a Jadue. Otro “éxito” de Piñera, rentable para él pero malo para el país.
 
          Ahora, contra todo lo que pueda parecer, el “Sí” no ha muerto. Por algo me llamó el otro día una candidata a concejal por Vitacura, Patricia Alessandri, para que apoyara su postulación desde este blog. Después de cerciorarme de que sigue siendo del ”Sí” y no le han lavado el cerebro, le garanticé que llamaría a nuestras huestes, o lo que quede de ellas, a votar por Patricia Alessandri en Vitacura. Y formulo, entonces, solemnemente, aquí y ahora, ese llamado, que espero se difunda ampliamente entre todos los del ”Sí” de Vitacura, comuna benemérita que fue la única de la Circunscripción Oriente que me honró con el primer lugar en la elección de senadores de 1989.
 
          Ahora ya no vivo ni voto en esa comuna, pero en la mía actual sólo votaré si hay candidatos del “Sí” que no se hayan arrepentido, “dado vuelta la chaqueta” ni convertido en  antenas repetidoras de los eslóganes de izquierda como “dictadura”, “violaciones a los derechos humanos” y otros del mismo jaez que vocean los marxistas que se iban a tomar el poder por las armas en 1973. Aunque muchos lo hayan olvidado, no lo lograron, gracias a las Fuerzas Armadas y Carabineros, que acudieron al llamado formulado en la Cámara de Diputados por los representantes del Partido Nacional, la Democracia Cristiana, la Democracia Radical y el Partido de Izquierda Radical de Luis Bossay, quien oportunamente vio la luz en su senectud, tras una vida al servicio de la extrema izquierda.
 
          El lavado cerebral masivo ha convertido a los agresores marxistas en “agredidos”; a los que iban a ser victimarios, en “víctimas”; y a los totalitarios, que luchaban por instalar otra Cuba en América, en “demócratas”, pese a que todavía no pueden abstenerse de emprender un impaciente trotecito ridículo si, de visita en Cuba, les dicen que podrán ser recibidos por Fidel Castro.
 
          Prácticamente caídos en manos del “No” los partidos de derecha, a los del “Sí” se nos ofrecen pocas posibilidades de votar por los nuestros, una de las cuales es Patricia Alessandri, en Vitacura; pero aunque no los haya en nuestra respectiva comuna, siempre conservaremos la prerrogativa de no votar por los del “No” o devenidos del “No”, convirtiendo nuestra abstención o voto en blanco en un poderoso factor de influencia electoral en un medio en que nos hemos quedado sin ningún partido que nos represente.

Hermógenes Pérez de Arce.