jueves, enero 31, 2019

SEÑOR @sebastianpinera YO NO LE DEBO NADA A LOS MAPUCHE.



ACLARACIÓN: Antes que todo debo dejar en claro que el pueblo mapuche se compone de muchas comunidades que velan por la paz, el trabajo y el respeto, pero hay un puñado de ellos que son manejados por partidos de la extrema izquierda, no son la mayoría.
El artículo o carta que van a leer NO ES DE MI AUTORÍA, me fue difícil saber quién la escribió, en fin, pero representa el sentir de la mayoría de las víctimas, de la gente honesta, que trabaja para tener lo suyo y ojalá el Sr. Piñera la lea.

Señor presidente de la republica de chile: 

¿Me puede decir de dónde cresta sacaron ustedes los inteligentes que gobiernan el país, que yo tengo una deuda con los mapuches? 

Sepa usted, a los mapuches no les debo nada, pero nada de nada. Ni siquiera tengo una gota de sangre que les deba, ni de nacimiento mucho menos de alguna transfusión, donde uno por lo general está inconsciente y no atina a nada, ni siquiera a elegir la sangre para salvar la vida. 

Vamos viendo, estos genios de la historia hacen gárgaras con los derechos ancestrales. 

¿Cuáles? ¿Quién dijo que los mapuches son los primeros habitantes de estas tierras? Todas vulgares mentiras que se han convertido en mito y objeto de culto de unos cuantos vivarachos que se han llenado los bolsillos a costa de “Vender la pomada en el extranjero”, maniobra muy bien accionada y explotada por un ignorantón, cuya única gracia es ser hijo de un amarillento ex presidente de Chile, que golpeó las puertas de los cuarteles militares, hasta botar a palos a Allende y después se ha hecho el loco. 

Ahora ¿Qué se les debe a los mapuches? 

Tengo mis muy serias y fundadas dudas, estos chilenos “privilegiados”, han recibido dadivas que significa, que sus ingresos mínimos están muy por encima de cualquier chileno medio. A saber, reciben plata sin trabajarle un día a nadie, se les subsidian las siembras, sus tierras, se les da animales para crianza, que después o se comen o venden y se les repone de nuevo y ahí va el círculo vicioso. 

Tienen beca para sus estudios, alimentación y vestuario gratis. Se les entrega ayuda en invierno porque se les mueren los animales con la nieve o porque se ahogan, porque no tienen pasto o porque les dio diarrea, o porque “accidentalmente” se cruzaron frente a un cuchillo de matarife. 

Se les entregan casas bastante buenonas, considerando que muchos no hacen nada, es decir llevan una vida regalada que ya la quisiera para mí. 

Existen algunas dificultades serias eso sí que es verdad. Cuando tienen problemas con su salud, no van donde el o la machi, (Me confundo, porque son ambiguos), ahí tienen que sacar numerito como cualquier chileno ¿Desconfían de sus ancestros sanadores? 

Por la justicia, ni qué decir, el proteccionismo sigue siendo un asco. Un delito terrorista cometido por un “mapuche” es un acto heroico, consecuencia del reclamo de justicia adeudada a través de la historia. 

Me da rabia, nunca envidia. Jamás envidiaré a los flojos que se llenan los bolsillos con dineros mal avenidos y que consideran que proviene de una “deuda histórica” , no envidiaré a los hediondos que se sientan a esperar que les llegue todo a la puerta de su casa. 

Mucho menos envidiaré a los flojos, que recibieron fundos hermosos, muy bien trabajados y en etapa de producción y que hoy son pastizales, mierdales pestilentes que se huelen a lo lejos, como un monumento a estos desquiciados que viven a expensas de los tontos que somos, los que ellos denominan “Huinca”. 

Por eso, permítaseme decirle señor Presidente de la Republica, que no comparto para nada sus propuestas para solucionar “la problemática indígena”, ¿Me puede decir qué problemática? ¿Quiere que le diga más? A usted le ha falta firmeza y consecuencia, este problema que han generado un montón de delincuentes pagados desde el extranjero, es un tema país y usted debe resolverlo mediante un plebiscito, usted no tiene autoridad moral para tomar decisiones con un grupo de políticos ignorantes y contaminados tanto por el dinero extranjero como por ideologías extremistas terroristas. 

Este es un tema país y el país debe decidir, este grupúsculo de avivados zánganos quieren un Estado propio, bueno plebiscitémoslo, porque es una decisión que involucra la soberanía nacional, pero por favor, no se muestre débil frente a los que siembran muertes, terror y el robo. 

Si la mayoría del país, como sé que sucederá, rechaza a estos “topos originarios” en sus intentos, pues que asuman que son una minoría, que son chilenos y que deben respetar nuestras leyes o se les aplicará con la misma severidad que a cualquiera de nosotros, que no tenemos “la fortuna ni la gracia divina”, de creernos “seres ancestrales”, descendidos de fastuosas naves provenientes de los aires, que los dejó sentados a la buena sombra de un raulí, lenga, araucaria o roble, mientras las mujeres fueron ordenadas a sacarse la cresta para darles de comer y vestir a estos audaces. 

¿Les debemos un estado independiente con leyes y costumbres propias? O sea ¿van a andar en pelotas? ¿Se van a bajar de las camionetas último modelo que hasta el más leso de los dirigentes posee hoy? ¿Le van a seguir sacando la mierda a palos a sus mujeres? ¿Y que va a pasar con los inicios sexuales de las mujercitas? ¿Y los incestos? 

¿Se recuerdan de dónde se generó la fisura palatina y el labio leporino en esta región? (A Dios, gracia hoy ha descendido a cifras casi normales, gracias a las leyes y valores de la repudiada sociedad chilena). 

Por supuesto que existen mapuches inteligentes y trabajadores, estudiosos y honrados, son los mas pacíficos, se integraron a la sociedad chilena como corresponde y asumieron los valores y tradiciones de la patria y curiosamente, son “castigados” por el propio Estado chileno, que les niega toda ayuda o aporte por ser “rurales”, son marginados por los de su misma raza. ¿Ha visto algún mapuche siendo atendido por un médico de apellido de la misma raza, por un abogado o arquitecto? Jamás, salvo que sea un “champurria” con billete en mano, como por ejemplo un Salas Melinao y ahí los ojitos de los profesionales estos, se les salen de las orbitas. 

Con estos mapuches de verdad, sí tengo una deuda histórica, una deuda por no haber hecho mas, porque se les respete y no se les margine de las comunidades y los beneficios que a otros pilluelos de siete suelas se les mal da. 

Por ello estimado señor presidente, déjese de discursos neo marxistoides, afírmese los pantalones y apunte donde debe. Todos los nacidos en este país somos chilenos y punto, los desgraciados que queman a las personas a mansalva, que roban ganado, que se toman predios, que profitan del estado, que reciben platas del extranjero para matar chilenos, sencillamente son delincuentes terroristas y deben ser tratados como lo que son : Delincuentes, que operan exactamente igual que los que apestan las cárceles, con su propio territorio, con sus propias leyes y con unos cuantos “capos” que los dirigen y reclaman buenos tratos muy apegados a los derechos humanos y ojo que los defensores no faltan, incluidos algunos con frondosas sotanas. 

Al final, respetuosamente señor presidente, quisiera decirle, no siga abusando de la paciencia de nosotros, “los normales”, los que vivimos perseguidos por el SII, por los bancos, por el retail, que no tenemos derecho a becas, ni a casas, ni a tierra y que nos sacamos la mierda para educar apenas a nuestros hijos, no sea cosa que a fuerza de tanto desatino e injusticia, nos vaya a dar la comezón, justa por lo demás, de formar en Chile, una patria justa, democrática, sin privilegios de ninguna clase y para ello tengamos que salir a la calle de Arica a Magallanes, para exigir democracia, autonomía, independencia, tranquilidad y justicia para todos los nacidos en esta patria y los extranjeros que la han adoptado como suya. Si eso pasa rodarán muchas cabezas, no le quepa duda, como también rodarán muchas de los privilegiados que se aprovechan de cargos públicos y que nos estrujan tal cuál, pretende hacer este grupo de terroristas que se disfrazan de representantes del “pueblo mapuche” y al que usted tanto miedo parece tener.

domingo, enero 27, 2019

LA DESCARADA "COMISIÓN CATRILLANCA".



Objetividad, ecuanimidad y razón no son imaginables entre los mayoritarios miembros izquierdistas de la Comisión Investigadora de la Cámara de Diputados por el "ajusticiamiento" del líder extremista de la comunidad separatista Temucuicui de la comuna de Malleco.

Casi  mareada de entusiasmo por considerar que tiene a su alcance a carnudas presas del Gobierno, la "Comisión Catrillanca" desvirtuó por completo el sentido de esta instancia parlamentaria, para transformarla en un juicio de revanchismo y odio político. Escudándose en el rótulo de "investigadores", los diputados de izquierda sólo quieren la cabeza del ministro del Interior y, si ello fuera posible, la del Presidente de la República "por su responsabilidad política y social"…

El país tomó razón, hace tiempo, de que se trató de un hecho policial, agravado por un error policial. Jamás hubo una instrucción y orden gubernamental en tal sentido, y así lo entiende el tribunal que lleva la causa.

Los integrantes de la comisión son Emilia Nuyado, Aracely Lequén, Natalia Castillo, Carmen Hertz, Marcos Cerda, Miguel Mellado, Fernando Meza, Manuel Monsalve, Álvaro Carter, Jorge Rathgeb, Jorge Alessandri y Jorge Sabag. Si bien no la preside, quien lleva la voz cantante es Hertz, jefa de la bancada PC y una gran cazadora de violadores a los derechos humanos.

Convertida arbitrariamente en tribunal de justicia más que investigadora, la Comisión tiene una larga lista de "interrogados", los que exceden el marco del caso específico para el que fue convocada. Entre muchos otros, serán sometidos a preguntas el ex ministro Jorge Burgos y el ex subsecretario Mahmud Aleuy, y figuran en su agenda todos los generales (r) y ex oficiales y suboficiales que tuvieron algún vínculo con lo sucedido.

En una determinación que transgrede la independencia y separación de Poderes del Estado, la Comisión inició gestiones con Gendarmería para visitar e interrogar a los ex carabineros presos por la muerte de Camilo Catrillanca.

La Comisión tuvo como su primer invitado "de honor" al padre del extinto, Marcelo, convertido en  símbolo por la izquierda para llegar a la responsabilidad política de Andrés Chadwick e incluso del Presidente, quienes a juicio del comun(ero)ista "deben renunciar". Bien aleccionado por el PC, él no se refirió a carabineros o policías, sino a "agentes del Estado".

Marcelo Catrillanca tuvo la audacia -también aleccionado- de decirle a la Comisión que semanas antes de la muerte de su hijo, el ministro Chadwick viajó a la zona "expresamente para aleonar a los carabineros en cuanto a represión".

Cuando se conformó, la Comunidad Temucuicui notificó un dominio  de 230 hectáreas, y ahora es poseedora de 1.900 por cesiones de la CONADI, por "recuperaciones" -apropiaciones indebidas- e incluso por adquisiciones a través de créditos de  INDAP, organismo dependiente del mismo Estado al que combate y del cual quiere separarse.

Días atrás, en una segunda asamblea de dirigentes mapuches comunistas en Temucuicui, se reafirmó "la lucha contra el Estado para lograr la plena autonomía y soberanía del pueblo mapuche".

Los diputados de izquierda se alteraron cuando colegas oficialistas le preguntaron a Marcelo Catrillanca por la gigantesca extensión de la comunidad y le consultaron sobre su financiamiento para vivir el día a día. Peor aún, ninguno de los parlamentarios extremistas fue instado a explicar por qué en la mismísima sede Legislativa ellos reciben con honores y protegen a un individuo que no se siente chileno y aspira a la partición del país. Ésa es la muestra de la solidaridad socialista, que siempre está por sobre los intereses nacionales.

Absolutamente clara respecto a un hecho policial, la Justicia tiene en prisión a varios carabineros, han debido declarar otros tantos y la fiscalía continúa recogiendo testimonios, como el de un testigo presencial que confesó haber visto a Catrillanca participando en el asalto y robo de sus autos a cuatro profesoras. Su descripción del sospechoso coincide  con lo declarado por una de las víctimas, a quien el tribunal le ha debido proporcionar protección ante las amenazas de muerte que ha recibido.

No hay que perder de vista, aunque la izquierda ya lo hizo, la raíz de los hechos que derivaron en la muerte del combativo ex caudillo de los estudiantes de Pailahueque. La causa de todo fue la acción criminal  de encapuchados contra las maestras rurales, utilizando armas y hachas.

La opinión pública se extraña de que acerca de ese asalto a inocentes mujeres, nadie habla y,  menos, en esta Comisión Investigadora. La diputada Hertz llevó la voz cantante para enviar un oficio al Presidente de la República para que aclare "cómo, cuando y dónde" se informó de la muerte de Catrillanca, consciente todo el país que el Mandatario se hallaba fuera del país, muy lejos.

Todos los testimonios e imágenes filtradas, en conocimiento o desconocimiento de la fiscalía de Collipulli, reflejan categóricamente que la única orden recibida por el comando del GOPE fue "interceptar el tractor azul" en el que huía   -¿de qué?- Catrillanca, internándose en los bosques de su comunidad. Familiares suyos afirmaron en el acto que "le estaba enseñando a manejar el vehículo" al quinceañero que lo acompañaba, en tanto la radio online mapuche informó que "venía de una recuperación" (corrida de cercas de propiedades de otros). Ni lo declarado por el testigo al tribunal ni esta contradicción, de la cual existen grabaciones, son materia de interés para la Comisión 'Investigadora', porque no tiene la menor intención de aclarar los hechos, sino tan sólo provocarle un daño al Gobierno y presentarlo como culpable.

Está más que comprobado que la decisión de dispararle a Catrillanca fue de un sargento, hoy en prisión, lo que fue corroborado por él ante la   Justicia, agregando la solicitud de perdón a la familia. Él y nadie más es responsable.

Voxpress.cl

jueves, enero 10, 2019

BROTES VERDES EN UNA DERECHA DESARTICULADA.



En “La Segunda” del 04.01.19 venía una carta de la vicepresidenta de la Juventud de RN, Francisca Richards, que decía: “El retorno del pinochetismo es sin duda un retroceso para la derecha, en términos políticos, valóricos, ideológicos e incluso electorales. No hay nada más nefasto que revivir un pasado tan oscuro como las terribles violaciones a los derechos humanos, todas injustificables y aberrantes. Hace tiempo que RN se desvinculó del pinochetismo y derogó de su declaración de principios toda alusión al régimen militar del dictador”.

Esa carta la suscribiría con gusto alguna vicepresidenta de las Juventudes Comunistas. Por otra parte, el “alejamiento” de RN de Pinochet, que ella acusa, fue puesto en duda hace poco cuando, en un reciente consejo general, su diputada Camila Flores se declaró pinochetista y resultó ovacionada.

Pero es verdad que la corriente dominante en el país va en el sentido de la carta de Francisca Richards. En la revista “Sábado” de “El Mercurio”, la ministra mejor evaluada del gabinete, Isabel Plá, confiesa que hoy votaría “No” en lugar de “Sí”, como lo hizo en 1988. Bueno, “era que no”: el Presidente que la designó es del “No”. Pero Isabel Plá pertenece a la UDI, partido al cual emigró desde RN (es de suponer que cuando esta última excluyó de su declaración de principios el reconocimiento al Gobierno Militar, cosa que la UDI aún no hace, aunque ya a nadie le extrañaría que lo hiciera, dado que forma parte del séptimo gobierno del “No” en 28 años).

Con todo, es un hecho que la corriente dominante extiende cada vez más sus tentáculos, hasta a la Universidad Católica, donde se incoa un proceso contra un connotado académico del “Sí”, el abogado Gonzalo Rojas Sánchez, tras una denuncia persecutoria en su contra de alumnos de izquierda que la Secretaría General de la Universidad ha acogido a trámite y dilatado en términos inexplicables. El profesor objeto de esta vendetta política ha impartido clases desde hace 43 años y formado parte del Consejo Superior durante 22.

Es que Gonzalo Rojas, también columnista de “El Mercurio”, es un hombre de derecha absolutamente consecuente (jamás ha votado por Piñera, con eso lo digo todo) y ha llegado a extremos de temeridad política, como el de recomendar, en su más reciente columna, la lectura de mi último libro, “Historia de la Revolución Militar Chilena 1973-1990”, cuya tercera edición espero llegue a librerías a mediados de enero, pese a que la prensa, con la excepción del citado columnista y una breve crónica de julio pasado del mismo diario, no lo ha siquiera mencionado.

      Claro, ese libro, en efecto, podría llevar a la cárcel a su autor si se aprobare la ley que castiga el “negacionismo”, pues prueba con documentos oficiales que el régimen militar respetó los derechos humanos, como que los garantizó tanto en su “Declaración de Principios” de 1974 como mediante circulares a sus dependencias uniformadas, que el texto reproduce, ordenándoles abstenerse de toda conducta atentatoria contra los derechos de las personas.

       Más todavía, el libro demuestra que hubo garantías internacionales de respeto a los derechos humanos ofrecidas por Chile y derivadas de que, si no se cumplían, se interrumpía el flujo de créditos y la venta de armamentos al país. El Gobierno Militar era, por ello, el primer interesado en evitar acusaciones de violación de los derechos humanos, pero a la vez enfrentaba un terrorismo implacable, patrocinado por el comunismo internacional, al cual debía combatir so pena de sucumbir. Pero el presidente de la Cruz Roja Internacional podía tener acceso a cualquier lugar de detención en Chile sin necesidad de autorización previa. Todo eso desmiente la acusación de una supuesta política de “terribles violaciones a los derechos humanos” a que alude la joven Richards, evidenciando que su cerebro ha sido tan escrupulosamente lavado como el de algunos dirigentes, parlamentarios, ministros de su partido y, desde luego, el del Presidente que ese partido contribuyó a elegir.

       No obstante lo anterior, el gobierno norteamericano encabezaba en 1978 ante la ONU la acusación contra el chileno de violar los derechos humanos, justo cuando en Chile reinaba la paz interna y en el mismo año caían apenas ocho personas en el curso de la lucha antiterrorista. Por contraste, en “El Mercurio” de hoy, p. A12, se informa que los norteamericanos dieron muerte sin forma de juicio y mediante una bomba en Yemen al terrorista Jaman-al-Badaui. Por acciones como ésa, que hoy los cerebros lavados describen como “terribles violaciones a los derechos humanos”, nos acusaban hace cuarenta años los propios autores de la expresión “double standard”.

       Naturalmente, este último y el lavado cerebral masivo tienen consecuencias políticas. La rendición incondicional de los partidos de derecha ante la mentira histórica da lugar a que en este momento haya en gestación tres nuevos partidos de derecha y representativos del “Sí”: el Partido Independencia de Valparaíso, el Partido Republicano, encabezado por militares en retiro; y Fuerza Nacional, liderada por el abogado Raúl Meza, connotado defensor de los Presos Políticos Militares. Además, un conocido oficial en retiro propone fundar otro exclusivamente formado por sus iguales y dedicado a defender a sus camaradas ilegalmente presos o procesados y que contaría con el voto unánime de la “familia militar”. Todo lo anterior aparte del movimiento Acción Republicana de José Antonio Kast, respaldado por decenas de miles de firmas, que por el momento ha renunciado a constituirse como partido.

       La verdadera derecha a veces da la impresión de que agoniza, pero no muere. El viejo tronco conservador pierde sus ramas más débiles y más proclives a inclinarse ante la dirección del viento, pero surgen otras nuevas y más sólidas para seguir defendiendo el ideario de la sociedad libre y de la ley y el orden; de la verdad histórica y del debido proceso a los presos políticos. Y no por nada su más destacado exponente encabeza las encuestas presidenciales de la actualidad.

Hermógenes Pérez de Arce.

domingo, enero 06, 2019

EL REALITY SHOW DE @gabrielboric EL SATÁNICO.



El diputado Gabriel Boric pareciera creer que el escenario de su actuación política no es el hemiciclo de la Cámara de Diputados, sino un reality show. En estos programas, recordemos, un grupo de jóvenes son sometidos a un encierro en una casa por un período de tiempo y grabados en sus interacciones con los demás ocupantes. La atmósfera que se crea es tal, que los integrantes parecen olvidar por momentos que están siendo grabados por cámaras. La situación de encierro y la atractiva apariencia de muchos de los jóvenes desatan la líbido, y parte del morbo de estos programas es mostrar en las pantallas las escenas a las que esto da lugar. También se realizan abundantes revelaciones personales, que tienen alto rating, y se revelan interesantes facetas de la naturaleza humana: entre ellas, nuestras miserias, como la mentira, la violencia y la traición. La promiscuidad es la sensación ambiental predominante, y los jóvenes compiten por permanecer en el reality y no caer en la fatídica condición de eliminado.
Boric fue elegido diputado y, como tal, tiene la enorme responsabilidad de elaborar las leyes que nos rigen a todos los chilenos. Demás está señalar la importancia que tiene esta función, en cuanto limita nuestras libertades, estableciendo obligaciones y deberes. Pero los líderes políticos tienen, además, otras responsabilidades: como autoridades públicas, sus actuaciones son miradas con atención por la ciudadanía, que ve en ellos ejemplos de comportamiento.
Gabriel Boric, junto a la diputada Maite Orsini, se reunió secretamente en París con Ricardo Palma Salamanca, el asesino confeso y condenado por la justicia chilena del senador Jaime Guzmán, en el marco de la campaña que el exfrentista hacía para lograr que no lo extraditaran a nuestro país.

Ha trascendido después un video, anterior a estos hechos, donde Boric se burla del senador Guzmán, al celebrar festivamente el regalo de una polera con la imagen de su rostro acribillado por las balas. Ya antes había alabado el rol que jugó el Frente Patriótico Manuel Rodríguez en nuestro país. Nadie con ese comportamiento reiterado y contumaz, de apoyo al uso de la violencia política para eliminar a los adversarios, puede ahora venir a rasgar vestiduras por los atropellos a los derechos humanos en Chile. El desprecio por la vida ajena que muestra el diputado Boric es impactante, y quienes tratan de minimizar su falta demuestran que su condena a las violaciones a los derechos de las personas es hipócrita, pues solo alcanza a sus aliados políticos. Una disculpa innominada no es suficiente. Si Boric quiere estar seriamente en política debe pedir perdón y dejar de lado la arrogancia y frivolidad con que ejerce su cargo. Si sigue comportándose como un chico reality, puede terminar eliminado de la política.
Luis Larraín A.

miércoles, enero 02, 2019

EL CHE GUEVARA, HÉROE DE LA IZQUIERDA CHILENA.

(Pinche la imagen para leer mejor).

Con sorpresa y alegría he sabido que los diputados de la UDI, Osvaldo Urrutia, Gastón von Mühlenbrock, Sergio Bobadilla y Juan Antonio Coloma, en el contexto del “negacionismo” en Chile, han pedido que el Ejecutivo disponga que “los textos escolares de historia consignen de manera fidedigna los asesinatos cometidos por este personaje oscuro, para que nuestros niños y jóvenes no sean embaucados con falsas figuras heroicas, que no son valorados en su real dimensión, que, en este caso corresponde a la de un criminal de la izquierda latinoamericana”.
Esta viril actitud de los diputados, que se aparta de la cobardía tradicional de los políticos de derecha, viene a reivindicar una verdad imprescindible de mostrar a la juventud chilena.
1.- Su primer homicidio fue un “ajusticiamiento revolucionario”.
En efecto, es mucho lo que se puede decir de este siniestro individuo pero veamos solo algunos casos que muestran al personaje en cuestión en toda su maldad, perversión, incompetencia y crueldad y que han sido mantenidas ocultas por sus cómplices de la izquierda internacional. Guevara llegó a ser un “fusilador” compulsivo e indiscriminado; su carrera la inició el 18 de febrero de 1957 matando a sangre fría a Eutimio Guerra un guía campesino acusado de pasar información al enemigo. En palabras del mismo Che: “la situación no estaba muy alegre en esos días; la columna, sin el espíritu forjado en la lucha … no acababa de consolidarse”.
Según Jaime Costa, comandante del Ejército Rebelde, presente en el lugar en que “se juzga” a Guerra, “no había seguridad concreta … entonces se forma el tribunal y acordamos que no había seguridad de que él haya sido un delator y por tanto no podía quitársele la vida. En entonces el Che dice, ´bueno, si no se la quitan ustedes se la quito yo´, entonces todo el mundo le dice, `¿por qué tu le vas a matar?. Si tu no eres cubano y no ha confesado que es delator. Y Ramiro que era el de mayor rango y presidente del tribunal dice no se puede fusilar. Y el Che sacó la pistola y lo mató ahí”. En palabras de Guevara, “…acabé el problema dándole en la sien derecha un tiro de pistola [calibre] 32, con orificio de salida en el temporal derecho. Boqueó un rato y quedó muerto”.
Seguidamente el Che procedió a apropiarse de las pertenencias de la víctima. Según el propio Guevara, le interesaba sobremanera el reloj. “Al proceder a requisarle las pertenencias no podía sacarle el reloj amarrado con una cadena al cinturón, entonces él me dijo con una voz sin temblar muy lejos del miedo: ‘Arráncala, chico, total…’ Eso hice y sus pertenencias pasaron a mi poder.”
Mas adelante y tratando de justificar el homicidio, el Che manifiesta públicamente: “Para enviar hombres al pelotón de fusilamiento, la prueba judicial es innecesaria. Estos procedimientos son un detalle burgués arcaico. ¡Esta es una revolución! Y un revolucionario debe convertirse en una fría máquina de matar motivado por odio puro.”
Posteriormente el Che escribe en su Diario:“…ejecutar a un ser humano es algo feo, pero ejemplarizante. De ahora en adelante aquí nadie me volverá a decir el saca muelas de la guerrilla”. En una carta a su padre refiriéndose a esta ejecución escribe: “Tengo que confesarte, papá, que en ese momento descubrí que realmente me gusta matar.”
2.- Asesinatos ejecutados personalmente por el Che Guevara.
Cometidos entre 1957 y 1959 no fueron parte de enfrentamientos armados sino ejecuciones a sangre fría, la mayoría sin investigación de las acusaciones y sin juicio.
En Sierra Maestra asesinó personalmente a 14 guerrilleros y civiles sospechosos de espionaje, traición, incumplimiento de deberes militares e intento de deserción. Asesinó a 175 personas en el campo de concentración de La Cabaña lugar en que se inició la eliminación sistemática de los opositores. Según le manifestó el mismo Guevara al agente Félix Rodríguez después de rendirse al ejército boliviano, los fusilados y ejecutados de diversas maneras no directamente por él sino por sus subordinados y por órdenes suyas, serían del orden de 1.500 opositores.
El 11 de diciembre de 1964, ante la Asamblea General de las Naciones Unidas y siendo Ministro de Industrias, Guevara confesó: “Fusilamientos, si, hemos fusilado, fusilamos y seguiremos fusilando”.
He dejando para el final el episodio que mejor expone su falsedad, carencia de moral y bajeza: La Traición de Santa Clara.
Los líderes del Segundo Frente Nacional del Escambray, una fuerza rebelde, no castrista, habían negociado la rendición de los soldados de Batista de guarnición en la provincia de Santa Clara, los que llegarían en tren a esa ciudad y ahí entregarían sus armas y se rendirían. Ante esto, Guevara, cuyas fuerzas operaban en la misma zona hizo una mejor oferta: les ofreció dinero a cambio de la rendición. Entre rendirse gratis y recibir dinero a cambio, los soldados de Batista optaron por la oferta del Che.
Lo que siguió es guevariano: Lázaro Ascencio, comandante del Ejército Rebelde señala que: “el tren blindado fue una acción de traición del Che Guevara … el famoso tren blindado estaba dispuesto a entregarse al Segundo Frente Nacional del Escambray, las condiciones eran muy sencillas: los soldados del tren blindado iban a entrar por la zona del acueducto de Santa Clara y allí nos iban a entregar las armas con el compromiso que ellos se quedaban ahí sin pelear… pero por filtraciones que sucedieron, el Che se entera de esa posibilidad y entonces, ¿qué hacen ellos?, atacan al tren blindado antes de que se entreguen a nosotros. Guevara y sus guerrilleros asaltan al tren y asesinan a diestra y siniestra a los soldados que esperaban la llegada de los miembros del Segundo Frente Nacional para entregarles su armas”.
La ciudad de Santa Clara, sin protección alguna es ocupada por Guevara y sus tropas, según Jaime Costa, compañero de armas de Fidel Castro desde las primeras acciones subversivas, “El primero que entra en Santa Clara ciudad es el Che y Félix Torres, un comunista de Las Villas , le dice ´Che, tienen a todos los chivatos (adherentes) de Batista y el Che, sin mas ni menos, los va matando sin interrogar; en esto el segundo que entra en la ciudad es (Camilo) Cienfuegos y el tiene una expresión: ´pero coño, aquí se han bañado en vez de agua, con sangre, porque donde quiera hay un muerto tirado en la esquina, han acabado con este pueblo!”
Ernesto Guevara, alias El Che, en Santa Clara asesinó por su propia mano a 23 personas.
Esta breve muestra de la calidad moral, la humanidad y el honor  de Guevara señalan lo profundo y grave del daño que la izquierda chilena ha hecho a nuestra juventud exaltando como modelo ciudadano, militar y humano, a través de la educación y la propaganda mentirosa, a este asesino brutal y repugnante.
Nota: A  diferencia del “Informe Rettig”, cada víctima de Ernesto Guevara (alias “Che), está documentada con nombre y apellido, fecha, lugar, circunstancias y testigos.


DespiertaChile.cl