lunes, octubre 28, 2019

ENEMIGOS INTERNOS EN CHILE.



El país está siendo atacado por los chavistas, maduristas y, por Cuba. El segundo que manda Venezuela así lo ha reconocido, Diosdado Cabello: “Lo que está pasando en Perú, lo que está pasando en Chile, lo que está pasando en Argentina, lo que está pasando en Honduras, Ecuador, es apenas la brisita. Ahora viene el huracán”. Ese un lado del problema. 
   El otro punto es que la clase política que ha gobernado en estos veinte nueve años es la responsable que el costo de la vida de los chilenos se haya encarecido. No es abuso del modelo tal como los militares lo entregaron, sino el abuso de los políticos hacia las personas comunes y corrientes que valoran el esfuerzo y el mérito.
   Y el último punto tienen que ver con el Instituto Nacional de los Derechos Humanos (INDH) y la Orden de los Jesuitas. Ambas trabajan juntas y han actuado contra la seguridad interna del país. Haciendo un poco de historia. La Orden Jesuita apoyo al gobierno marxista de Salvador Allende y después del 11 de septiembre de 1973, naturalmente, se opusieron al gobierno militar y ayudaron a los terroristas del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR). Esa fue su labor en defensa de los derechos. Ayudar a quienes destruyeron el país. Recientemente murió un jesuita que fue galardonado por Bachelet por los derechos humanos, José Aldunate Lyon. Y casi al mismo tiempo, la universidad jesuita de Georgetown le entrega a la Alta Comisionada de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas, Michelle Bachelet, un premio por los derechos humanos. Ahí estaba también Hillary Clinton. Si alguien vio el canal Que no piensen por ti, en un comentario se lee algo parecido: “Bachelet y Clinton dos MK-Ultra”. 
   Antes que estallara la Revolución se supo que el INDH junto con el Servicio Jesuita Migrante (SJM) habían entrado al país al militar venezolano, Josue Joanan Niño, quien pidió refugio porque su vida corría peligro. El medio así titula la noticia “Corte acusa al INDH de manipular ingresos de venezolanos a Chile desde Bolivia y Perú”. Eso fue en julio. Fue en la frontera Chacalluta. Según informan, las dos organizaciones quisieron entrar al militar en forma ilegal: “Esto motivó el rechazo la acción constitucional, que resolvió la Corte de Apelaciones de Arica. En el fallo, se señala que el extranjero nunca se presentó personalmente a manifestar su intención de formalizar una solicitud de refugiado. De esta manera se desacreditaron los argumentos expuestos por el Servicio Jesuita Migrante, al cual pertenecería la abogada Brondi”. 
   La ONG Servicio Jesuita Migrantes desde el primer gobierno de Sebastián Piñera es financiada por los contribuyentes chilenos. O sea, tenemos una organización que atenta contra el modo de vida de los chilenos y, además, la mantenemos con nuestros impuestos. 
   En el tráfico humano desde Haití que hubo en segundo gobierno de Michelle Bachelet, no les cabe la menor duda que también estuvieron involucrados los jesuitas. 
   Ahora me acordé, que también en la región de La Araucanía había jesuita haciendo activismo, según denunció un canal de Youtube. 
    Tanto el INDH como el SJM son partidarios de las fronteras abiertas, o sea de la globalización de la ONU. 
   Cuando llegó la segunda oleada de venezolanos, recuerdo haber visto un video por Youtube, en que un jesuita pida no respetar la ley, porque había niños en la frontera. Los jesuitas, en realidad, son el brazo armado de las Naciones Unidas. El Vaticano apoya el Nuevo Orden Mundial. Desde luego, que el pequeño Estado no recibe con brazos abiertos a los inmigrantes de África u otros países. 
  A ambas organizaciones no les ha importado que el país no tenga las condiciones para recibir tantas personas. Se trata de cifras. 
   Ambas son traidores. Aprovechará esta oportunidad para comentar las palabras de dos académicos de la ex derecha que respaldan ingenuamente la labor del Instituto Nacional de los Derechos Humanos. Uno es del Director de la Escuela de Filosofía de la Universidad de los Andes, el doctorado en filosofía, Daniel Mansuy , quien escribió la columna Los derechos humanos del INDH. Todo ello porque la izquierda se opuso a la designación del demócrata cristiano, Sergio Micco: “Todo indica que, para la izquierda, es inaceptable perder el control de una institución pública que sentía como propia. En ese sentido, la elección de Micco es una excelente noticia: en virtud del carácter universal de los bienes que busca resguardar, el INDH no puede ser patrimonio exclusivo de ningún partido o facción”. 
   En primer lugar, el INDH es un patrimonio de la izquierda. En segundo lugar, hay existe una diferencia semántica en lo que se refiere derechos humanos entre la izquierda y la derecha. Para las personas conservadores liberales, los únicos derechos importantes son la vida, la libertad y la propiedad. 
    La izquierda o el progresismo no considera la propiedad como un derecho humano. En el segundo gobierno de Bachelet, en la nueva constitución socialista la propiedad tendría una función social. El Estado expropia sin compensación como en la UP o en la Venezuela de Chávez y Maduro. Para ese sector, cualquier deseo se convierte en derecho. 
    Pablo Ortúzar en su artículo Los chanchos de Orwell sale en defensa del demócrata cristiano: “Quienes han planteado últimamente que Sergio Micco, quien tiene una hoja de vida intachable en el plano de la defensa de los derechos humanos y la democracia, no debería poder asumir el cargo de director del Instituto Nacional de los Derechos Humanos por ser católico contrario al aborto, han cruzado esa línea divisoria”. 
    El señor Micco pertenece al partido que ha apoyado la persecución hacia los militares que nos libraron del comunista y del terrorismo. No sé cuál es su defensa de los derechos humanos. Las feministas de izquierda se opusieron a la designación de Micco por ser contrario al aborto.
    Desde el mismo momento en que se creó el INDH denuncie a través de este blog que era sesgado. Tiene como atribuciones querellarse contra los agentes del Estado que estuvieron entre 11 de septiembre de 1973 y marzo de 1990. No se querellan contras los terroristas y guerrilleros. O con la guerrilla del Mir durante la Unidad Popular. 
  Ambos intelectuales de la ex derecha no conocen el estatuto del Instituto.
   Ambos académicos se hacen los lesos ante la abierta discriminación que sufren los militares ancianos del gulag de Punca Peuco y de otros penales, y que el INDH apoya tal trata desigualdad ante la ley. 
   El INDH es partidario de derogar la Ley de Amnistía de 1978 que como sabemos beneficio a la izquierda. 
   El INDH no va presentar querella contra el terrorista del FPMR confeso y actual diputado del Partido Comunista, Guillermo Teillier, tampoco contra el terrorista y académico de la Arcis, Pascal Allende, y, finalmente, contra el carnicero de Queronque, el terrorista del Mir y ex ministro de economía de Patricio Aylwin, Carlos Ominani. Los derechos humanos han sido pues un simple caballo de Troya por parte de la Izquierda. 
    Ambos académicos de la ex derecha desconocen que el Instituto Nacional de los Derechos Humanos como el Museo de la Memoria y de los Derechos Humanos fueron creados por personas ligadas a los grupos terroristas chilenos, el Mir y el FPMR. 
  El INDH fue creado para neutralizar a las Fuerzas Armadas y de Orden, en primer lugar. Y en segundo lugar, a que la sociedad civil o para ser preciso, para que las personas que no son de izquierda carezcan del derecho ejercer el legítimo de derecho a la defensa. Y por último, neutralizar derecho a ejercer el derecho a la rebelión.
   El INDH defiende a delincuentes y terroristas. No les interesa las personas decentes. Ese organismo fue creado para desarmar a la sociedad civil y a las Fuerzas Armadas, mientras la izquierda hace su Revolución.
 Al INDH no le interesa los daños a propiedad ya sea pública, ya sea privada, pues la izquierda no considera la propiedad como un derecho humano. Por eso, jamás se ha puesto a lado de los camioneros, cuya fuente de trabajo ha sido destruida. Ni menos ahora que personas humildes le hayan saqueado sus negocios. 
  Lo único que le preocupa a esa nefasta institución que al lumpen proletariado y terroristas no les pase nada, si son capturados. Eso lo confirma las noticias que hemos visto desde que empezó el motín. 
   El actual director INDH, Sergio Micco dijo: “No estamos en guerra con la PDI ni Carabineros”. Mentiroso. No van a querellar contra quienes usaron aceleradores para provocar los incendios en los edificios.
    Si Carabineros de Chile arresto a una cantidad de determinadas de personas la semana pasada, la fuerza pública simplemente cumplió su labor. 
   Al INDH como la prensa le interesa no más las balas procedentes de las Fuerzas Armadas y Orden.

     La Orden jesuita tiene que ser expulsada del país como lo hizo el rey español Carlos III. Y el INDH tiene que ser borrado de la faz de la Tierra.

Javier Bazán Aguirre.

jueves, octubre 24, 2019

LA PRENSA Y LA REALIDAD EN CHILE.




Pensaba escribir sobre otra cosa. Sin embargo, los hechos del 18 y 19 de octubre me superaron. Primero hay que reconocer que la manifestación que termino en los destrozos del ferrocarril metropolitano o metro no fueron espontáneos. Las evasiones masivas realizadas por los estudiantes del Instituto Nacional fue un pretexto para otra cosa para armar un motín. Una insurrección. La excusa del alza del pasaje no justifica la destrucción. Una insurrección. Muchos olvidan que el metro funciona con electricidad. El metro de Santiago opera con un sistema de las llamadas energía alternativas, que son caras. 
    La bancada del Partido Comunista saco emitió un comunicado donde respalda las evasiones masivas, que desembocaron en la destrucción de varias estaciones del metro el día 18. Total 72 estaciones. Y el día 19 el ataque a los supermercados. El lumpen proletariado desatado. El ataque que sufrió el ferrocarril metropolitano fue planificado. Volvamos a la declaración del PC: 
   “Como bancada del Partido Comunista respaldamos las llamadas ‘evasiones masivas’ convocadas y desarrolladas por estudiantes y ciudadanos ante el alza de la tarifa del Metro de Santiago. Son acciones legítimas de desobediencia civil, una expresión de reclamo acumulado ante el aumento continuo del precio de los servicios básicos, que han encarecido el costo de la vida, especialmente en los sectores vulnerables”.
    La declaración contiene varios errores. Como de costumbre, ellos son los establecen quién está en lo correcto. El paro de los camioneros durante la Unidad Popular no se consideraría como un acto desobediencia civil. El Partido Comunista formo parte la ex Nueva Mayoría que realizó una reforma tributaria expropiatoria, según la cual el 1% más rico de la población la iba costear. Al final, todos la pagamos. Por tanto, no pueden reclamar “el aumento continuo del precio del precio de los servicios básicos, que han encarecido el costo de la vida”. 
   El Frente Amplio meses atrás se había quejado de que acceder a las viviendas o la casa propia era inaccesible, si ellos aprobaron la nefasta reforma tributaria de Bachelet. 
    Desde los noventa, han aumentado los impuestos. Y los gobiernos de Piñera I y Bachelet II aumentaron aún más. O sea, los políticos son los responsables del costo de la vida. 
   Al Partido Comunista no les interesa los sectores vulnerables. Recuérdese que la empresa de contenedores de San Antonio cerró a gracias a su dirigencia comunista. 
    Luego, cuando el día sábado se desató la Revolución y el caos por todo Chile, no entendí porque familiares comenzaron a reclamar el desfalco de Carabineros, los Fondos de Pensiones y los bancos. La prensa puso el tema del desfalco de Carabineros, la corrupción en el Ejército. Los nuevos indignados no se enojan de la deuda millonaria de TVN o de la deuda de Enap. Tampoco se han indignado de los empleados públicos en los ganen el triple de lo que gana la gente en la empresa privada. Los que producen mantienen a los que no producen. Comenzó la nueva indignación a igual que gobierno de Piñera. Es el mismo patrón, pues comenzaron con la calidad de la educación, luego el abuso de la multi tienda La Polar, la desigualdad y para finalmente cuestionar el modelo que nos ha traído prosperidad. Quienes se han encargado de hacer que el modelo falle han sido, pues, los empresarios coludidos con la clase política a través de la “Alianza Publica Privada”, que es una forma de corporativismo. Los grandes empresarios amaban al socialista Ricardo Lagos, quien creador del Transantiago y los empresarios de la Sofofa son los que financiaron la última campaña presidencial de la comunista, Michelle Bachelet. 
   El diario El País de España da una descripción parecida de la razón de las revueltas en Chile:
 “Pensiones indignas, salud precaria, sueldos miserables, educación de mala calidad, licencias médicas por depresión, deuda universitaria vitalicia, sueldos de la élite política, delincuencia sin control, empleos precarios, Pagogate y Milicogate [los escándalos de corrupción en Carabineros y el Ejército, respectivamente]”. 
   Deseo aclarar que la corrupción en Carabineros y en el Ejército se debió que a los altos mandos de ambas instituciones se pusieron al lado de los políticos. Ambas instituciones han sido atacadas sistemáticas en estos veinte seis años de democracia. Por eso, no han respetado a Carabineros. No es por la corrupción. El Ejército ha actuado lo justo y necesario, porque saben que los políticos los van traicionar. 
   Los únicos responsables de lo que describe El País es la clase política que se ha reído de las personas desde 1990. 
    A más de alguno por celular habrá escuchado el análisis del periodista Bernardo de la Maza. Mientras otra persona lo escuchaba, al periodista le salió lo demócrata cristiano, pues dijo que los extremos son malos. Cuando las personas quieren puro orden, saben cómo terminan las cosas. Obviamente, refiriéndose al 11 de septiembre de 1973. Él se olvida del Acuerdo de la Cámara de Diputados de agosto de 1973, en que la mayoría del país llama a las Fuerzas Armadas, porque íbamos hacia un gobierno totalitario comunista a través de una guerra civil. Todavía no se entera de las palabras del presidente de senado, el demócrata cristiano, Eduardo Frei Montalva en Acta de Rivera: “Nada puedo hacer yo, ni el Congreso ni ningún civil. Desgraciadamente, este problema se arregla con fusiles, de manera que en vez de ir al Congreso, debíamos ir a los regimientos. Les aconsejo plantear crudamente sus aprensiones, las que comparto plenamente, a los Comandantes en Jefe de las Fuerzas Armadas, ojalá hoy mismo”. La mayoría de los que murieron después del 11 de septiembre eran terroristas o guerrilleros. El ejército paralelo de Salvador Allende no existió para el periodista De La Maza. Lo que había en Chile hasta la intervención militar no era la democracia liberal. 
    Tanto el ejecutivo como el parlamento congeló la tarifa del metro. Sin embargo, en estos veinte seis años, los políticos jamás han congelado el sueldo. En el segundo gobierno de Bachelet, ella se subió su sueldo y la jubilación de los ex presidentes. Cuando supe lo que hizo el presidente de la República, me dije: “vamos hacia Venezuela”. En cambio, para Hermógenes Pérez de Arce nos encaminamos hacia la argentinización. El hecho es que, a partir de ahora, los políticos van intervenir en los precios por cualquier pretexto. En varias áreas el mercado ha sido intervenido. 
   Deseo citar las palabras del ex bloguero Cuidado por Quien Votas , quien en el otro blog describe el papel de la prensa. 
   “Ya la prensa ha establecido la verdad oficial sobre lo ocurrido estos días: la gente se aburrió de los "abusos". Curiosamente, esta "espontanea" manifestación olvido algunos abusos, como los de los funcionarios de la salud y sus paros reiterativos que afectan a los usuarios; como los del poder judicial, …. deja libres a delincuentes y protege a ultranza sus derechos a costa de los de sus víctimas; los abusos de los parlamentarios ignorantes de izquierda; el abuso del sistema de tombola para acceder a los colegios, que deja fuera al mérito a favor del azar, etc. Pero curiosamente no fueron estos los objetivos de la furia del "pueblo indignado". Solo fueron atacados los símbolos del capitalismo odiado por algunos sectores de la izquierda. Que notable "espontaneidad"! Y los chilenos piden una "vida digna" y golpean cacerolas cuando hoy en Chile nadie ya muere de hambre, más bien hay una epidemia de obesidad, y la pobreza cayo a menos del 8%, muy lejana de aquella que existía en tiempos previos a 1973.Se necesita una vida digna, con un piso que implica el derecho a tener zapatillas Adidas, un LED de 50", un smartphone galaxy 11 y todo gratis por supuesto. Y una pensión que duplique los sueldos sin haber colocado imposiciones durante su vida laboral. Nada más justo”. 
   Como ven la prensa una vez más cuenta un relato alejado de la realidad. Los principales personajes de la televisión son de izquierda. Ni siquiera ahora podemos calificarlos del cuarto poder, pues formar parte del establishment o del poder establecido. Los periodistas progresistas se erigen como predicadores. Por eso, mucha gente, no acá dejo de ver la televisión y prefiere informarse por los diversos canales de Youtube. Sin embargo, esa plataforma no es segura, ya que este año cerraron el canal Conociendo la Verdad (CLA), luego que entrevistaran a una abogada mexicana que criticó la visita de la Alta Comisionada de los Derechos Humanos, Michelle Bachelet. La ex presidente comparo el país de los burritos y tacos con Siria, que como sabemos es un país en guerra. 
    A la prensa le interesa más los muertos por balas provenientes del Ejército o Carabineros que los incendios y saqueos con resultado de muerte de personas inocentes, que defienden sus propiedades o los supermercados.
Javier Bazán Aguirre.

lunes, octubre 21, 2019

¿CHILE, BAJO ATAQUE VENEZOLANO?




Queridos amigos, les tengo malas noticias.
La vida me ha puesto tres o cuatro veces ante disyuntivas difíciles en que me ha atacado la duda. Una sola vez elegí no hacer nada y fue un grueso error del cual aun me arrepiento. Esta vez decidí decir lo que sé.
Lo que sigue me fue proporcionado por amigos, algunos patriotas de izquierda, por otros agudos analistas políticos, también por personas que tienen acceso a este tipo de información y en parte también de mi propio análisis. Creo que lo que sigue es verdad, no puedo jurarlo poniendo en prenda mi alma inmortal, pero si comprometer una módica pasada por el purgatorio. No confío en la exactitud de las cifras. Creo que hay que tomarlas solo como referencia.
Chile está bajo ataque del Gobierno de Venezuela.
Inicialmente mi análisis me puso en la línea de identificar un intento de “caracazo”. Había muchas señales que lo confirmaban y hasta ayer la situación parecía ir mas o menos en esa línea, luego me llegaron varias informaciones graves:
1.- Habrían entrado a Chile entre 5.000 y 6.000 venezolanos implantados entre los refugiados. Personas con preparación en sabotaje, combate urbano, inteligencia. Dotados de amplios recursos económicos en asociación con el tráfico de drogas.
2.- Su misión. Destruir empresas y entidades emblemáticas relacionadas con intereses norteamericanos: Walmart, Coca Cola.
3.- Destruir los componentes del funcionamiento del Estado: Metro, transporte público, energía eléctrica, redes de bancos.
4.- Establecer control territorial en asociación con grupos de traficantes de droga, contrabando, trafico de personas.
5.- Se habrían detectado alrededor de 700 infiltrados, los que habrían sido expulsados.
La motivación sería destruir el “ejemplo de éxito neo liberal” y “vengar la participación de Piñera en Cúcuta y en el grupo de Lima.
Nuestras debilidades:
1.- Una clase política que incluye personas corruptas y otras con ambiciones de poder insaciables e inalcanzables.
2.- Un gobierno políticamente incompetente enfrentando una insatisfacción social y económica que no logra entender.
3.- Ayudistas en Chile, pocos pero bien entrenados e incondicionales: Partido Comunista con su brazo armado, el FMR; grupos anarquistas y otros nihilistas.
4.- FFAA sin experiencia en control de disturbios y arrinconada por organismos de DDHH y por la prensa que en su mayoría es susceptible a los mensajes de izquierda.
Situación actual:
1.- El Estado ya no controla varias ciudades.
2.- Las FFAA no han logrado restablecer el control estatal.
3.- El movimiento subversivo ha ido encontrando mayor apoyo en algunos segmentos políticos y sociales.
Lo que viene:
El empujón final que vendrá en los próximos días. Cortes de energía eléctrica, desabastecimiento de víveres, incapacidad para moverse, empresas detenidas, población asustada.
Es lo que podría decir por ahora. Por favor, no me odien, no soy el culpable, sólo el mensajero.
FernandoThauby.

domingo, octubre 20, 2019

REVOLUCIÓN COMUNISTA SUBSIDIADA POR EL ESTADO.



"Como bancada del Partido Comunista respaldamos las llamadas 'evasiones masivas' convocadas y desarrolladas por estudiantes y ciudadanos ante el alza de la tarifa del Metro de Santiago. Son acciones legítimas de desobediencia civil, una expresión de reclamo acumulado ante el aumento continuo del precio de los servicios básicos, que han encarecido el costo de la vida, especialmente en los sectores más vulnerables". 

Ahí está la huella digital, la confesión de quiénes están detrás del conato revolucionario. ¿Quién ha promovido esto? Todos, de izquierda a derecha. El Estado, con el respaldo de todos, ha subsidiado generosamente esta revolución comunista, llenando de dinero a los revolucionarios y persiguiendo inmisericordemente a las fuerzas del orden que fueron llamadas a derrotarlo en su intento de tomarse el poder entre 1970-73 y que debieron derrotar también a sus grupos terroristas ampliamente financiados y pertrechados desde el exterior entre 1973 y 1990, afortunadamente vencidos por nuestras fuerzas armadas y carabineros, que a su vez resultaron derrotados en la posguerra dialéctica y judicial habida desde 1990 hasta hoy.


¿La civilidad? En su peor expresión moral. Cuando ha pasado el peligro ésta, toda, de izquierda a derecha, se ha rendido ante la retórica comunista y la ha hecho propia. "Una mentira mil veces repetida pasa a ser verdad". Hoy día mismo, un columnista de "El Mercurio" a quien conocí siempre como partidario del Gobierno Militar, se muestra tan virado mentalmente al extremo que escribe en ese diario: "Eso me ha hecho sentir desde hace mucho una culpa horrible con respecto a las innumerables víctimas de la dictadura. Porque lo moralmente correcto era, en ese momento, cuando la podredumbre había aflorado, estar con ellas a cualquier costo, tener la valentía ética que exige ese pensador antiguo, una valentía que no tolera otra conducta que no sea un rechazo activo".

Aquí tenemos los dos ingredientes de la revolución comunista en curso: la justificación de su violencia subversiva presente y el olvido de la pasada; y la anulación ética de la respuesta ciudadana legítima, que fue, para empezar, la que convocó a los militares a actuar, estimulados por Aylwin y Frei y, para qué decir, los líderes de la derecha, por cierto, el 11 de septiembre de 1973. Como testimonio el inserto de "El Mercurio" publicado el 11 de septiembre pasado, que remeció a un país desmemoriado y que ese diario seguramente nunca más se va a atrever a volver a publicar, amenazado, como lo está, por los rojos de su interior y de su exterior.

Pues el país entero no sólo ha dejado que una dictadura roja le imponga su versión y se apodere del Poder Judicial, sino que ha sido coautor activo de la persecución a los militares y la entrega millonaria de recursos a la subversión. El principal presentador de querellas contra uniformados ha sido Sebastián Piñera en su primera y administración. Él ha saturado Punta Peuco, tras cerrar Cordillera. Con su concurso se han acumulado los 6.200 millones de dólares (otro Transantiago) en pagos compensatorios a la extrema izquierda y él aparta  (Subsecretaria de Justicia y DD. HH.) para los próximos cinco años un total de dos mil millones de dólares anuales más. Y eso sumado a las millonarias compensaciones acordadas por las Comisiones Rettig y Valech. Se ha estructurado una clase revolucionaria millonaria roja que se siente acreedora moral del resto del país e impune para cobrar cien mil pensiones de falsos exonerados que se llevan otros cientos de millones de dólares anuales, oficialmente proclamados como "víctimas" por la rendición de un comandante en jefe del Ejército que culpó a su propia institución de "todos los hechos punibles y moralmente reprochables del pasado" (2004) y con perspectivas multimillonarias para el futuro, pues se acaba de condenar a tres años de cárcel a quien fuera un joven teniente en 1973 con sólo el dicho de un acusador rojo que sostiene haber ido torturado por él hace más de 45 años y a quien se le premia con una indemnización de 30 millones de pesos, violando todas las bases del derecho penal de todos los tiempos. Se inventa delitos nuevos ("lesa humanidad") para juzgar a uniformados ya juzgados y absueltos; se les mete presos sin respetar las leyes ¿y se pretende que ahora planten cara a la revolución roja subsidiada por lo mismos que persiguen y persiguieron a sus antecesores?

El país no tiene autoridad moral para trasladar ahora el peso de lo que debería ser la reacción normal de un régimen jurídico democrático ante un conato revolucionario comunista, porque el país condenó a los mismos que llamó ya una vez a rescatarlo y ha premiado multimillonariamente a los subversivos, haciéndolos dignos de la compasión nacional.

La revolución de ayer fue subsidiada y estimulada por el Estado, y fue motivada por los grandes inculpadores de los uniformados, Aylwin, Piñera y Cheyre. Y ha sido moralmente absuelta por todos los chilenos de nula memoria y escasa personalidad que "se han dado vuelta la chaqueta", han alterado la verdad del pasado, han condenado a quienes los salvaron y subsidiado y premiado a quienes intentaron subyugarlos. Esto está sólo comenzando, Cualquier interrogado sospechoso de terrorismo entre 1973 y 1990 hoy es pensionado como presunto torturado y está preparando una querella para acusar a un militar (r), tal como lo ha hecho el que acusó a Labbé y lo tiene condenado, además de prepararse a recibir 30 millones de pesos. La clase revolucionaria subsidiada por el Estado se multiplicará numéricamente en el futuro próximo. El desincentivo a las fuerzas de orden se está acentuando y acentuará. El espectáculo de los carabineros en fuga ante los violentistas, sabedores de que si disparan serán condenados, anuncia que todo esto sólo irá para peor.

¿Qué esperaban los chilenos? ¿Que si llenaban de plata a los rojos, condenaban a los uniformados y acogían moralmente la retórica comunista, la ley y el orden iba a prevalecer? No. Lo previsible era lo que vimos anoche, que viniera la revolución, que los uniformados, escarmentados, no se prestaran para servir otra vez de carne de cañón. Chile se lo buscó y eso es lo que tiene hoy. Y por eso debemos prepararnos para lo peor. 

Hermógenes Pérez de Arce.

domingo, octubre 13, 2019

CARTA ABIERTA A DONALD TRUMP. (Open letter to @realDonaldTrump ).



Estimado señor Presidente: Le escribo porque usted es una figura de  coraje político casi único en el mundo contemporáneo, como que se ha atrevido a decir que el gobierno de Pinochet salvó a Chile del comunismo, verdad que sólo un estadista como usted o el Presidente del Brasil, Jair Bolsonaro, han osado manifestar públicamente.

Le escribo, además, porque en días recientes una repartición de su gobierno ha conminado al régimen del Perú a poner fin a las situaciones que allá mantienen a cien personas en condición de presos políticos.

Estos últimos son definidos como quienes han sido privados de su libertad, no en razón de lo que disponen las leyes propias de un estado de derecho, sino por consideraciones políticas y contrariando la legislación.

Ése es el caso de Chile, atendiendo a esa definición. Actualmente hay más de 200 presos políticos en diferentes recintos penales, el doble que en el Perú, condenados contraviniendo normas expresas de la Constitución y las leyes chilenas. Esas personas han sido perseguidas por haber combatido, entre 1973 y 1990, a terroristas que pretendían hacerse del poder y cometían graves atentados contra militares y la población civil, con el respaldo de Cuba, la Unión Soviética y Alemania Oriental, en este último caso todo ello documentado por el autor norteamericano John O. Koehler en su libro "Stasi".

Corresponde que su gobierno conmine al chileno actual, tal como lo ha hecho con el del Perú, porque el régimen del Presidente Piñera, en su actual mandato y en el anterior de 2010-2014, no sólo fue cómplice activo sino coautor de la mayor parte de las querellas ilegales que condujeron a privar de libertad a esos 200 presos políticos. Lamentablemente en Chile el Poder Judicial se halla, desde hace diez años, en manos de una mayoría de jueces rojos que ejercen una verdadera razzia contra quienes derrotaron por las armas al terrorismo de extrema izquierda.

En estos mismos días el régimen ha suspendido de su cargo al alcaide del presidio de Punta Peuco por limitarse a aplicar la ley sobre libertad condicional a 15 presos políticos militares. El gobierno así contraviene no sólo la ley, sino la Constitución chilena, al negar la libertad condicional a esos presos políticos, pues la Carta veda aplicar las leyes penales con efecto retroactivo y establece el principio de que debe regir la norma más favorable al reo.

Como en Chile no existen instancias políticas capaces de oponerse al control que la extrema izquierda, con la coautoría del gobierno y la indiferencia de la mayoría parlamentaria, ejerce sobre el Poder Judicial y que ha originado los más de 200 presos políticos existentes, sólo un estadista de categoría mundial y dotado de suficiente coraje político, como lo es usted, puede ejercer verdadera influencia diplomática y hacer respetar los derechos humanos de estas personas. Nadie más es capaz de elevarse por sobre las consignas izquierdistas reinantes y que repiten las "élites habladoras" (Paul Johnson); nadie puede denunciar mejor que usted este atropello chileno a los derechos humanos, la Constitución y las leyes que se está perpetrando contra los militares que derrotaron a la guerrilla marxista.

Un reciente video norteamericano advierte a los propios Estados Unidos sobre el riesgo de que los combatientes contra el terrorismo de Al Qaeda caigan en el futuro en manos de jueces politizados de izquierda, como lo dice textualmente, y muchos uniformados pierdan su libertad en venganza por haber triunfado contra los terroristas.

Es la oportunidad, señor Presidente, de que usted intervenga, una vez más, en defensa de la libertad, los derechos humanos y el estado de derecho en el mundo y, en particular, en un país amigo que comparte los mismos ideales de los Estados Unidos pero está en este momento siendo sede de un múltiple atentado contra los derechos fundamentales de quienes combatieron para permitirle preservar su democracia y su libertad.

Confío en que los representantes de su gobierno en Chile o personas que compartan sus ideales de libertad y fidelidad a la verdad histórica le hagan llegar esta petición y que ella promueva la misma acción en Chile que su gobierno ha desplegado en el Perú, en defensa de la legalidad, la justicia y la verdad que han sido atropelladas para privar de su libertad a 200 presos políticos militares en mi país.

Hermógenes Pérez de Arce.