TEMUCO EN SHOCK.

" Incendio destruyó casa de la familia Luchsinger " tituló un medio electrónico para informar sobre el atentado terrorista contra la propiedad del empresario Werner Luchsinger, quien pereció calcinado junto a su esposa Vivianne McKay, la madrugada de este viernes. Esta mirada distante del sitioweb, da cuenta de cómo cierta prensa manipula la información, enfatizando sólo aquello que es funcional a sus intereses políticos.

El dato real es un atentado terrorista y no un hecho simplemente bomberil. Se desea ocultar o desacreditar del modo que sea, la presencia y denuncias sobre la actividad de bandas organizadas, con armamento, logística, entrenamiento, ayudistas y el manto protector de dirigentes políticos de izquierda y de la buena prensa siempre dispuesta a exagerar, criticar y denunciar la más mínima reacción del Estado frente a los desafíos contra el orden democrático.

Se trató de un hecho infame, condenable, innoble ; donde una veintena de encapuchados llegan amparados por la oscuridad al fundo Lumahue cerca de Vilcún en la IX Región, para asaltar, robar y asesinar a este matrimonio. Werner se defendió con un arma calibre 22 logrando herir en el tórax a uno de los extremistas, el cual fue detenido cuando huía ayudado por otro sujeto que lo abandonó al momento que Carabineros lo arresta, no sin antes intercambiar disparos con los efectivos de la policía uniformada.

El individuo vestido con la indumentaria del grupo hechor, fue identificado como Celestino Cerafín Córdova Tránsito (26), y es un "machi" de la comunidad Juan Quintupil. El juez de garantía de Temuco Nicolás Martínez Conde, accedió a la petición de los fiscales Luis Arroyo y Alberto Chifelle quienes pidieron 10 días de detención para Córdova, quedando éste incomunicado hasta las 20 horas de hoy en el Hospital Regional de Temuco, centro en el cual permanece custodiado por efectivos del GOPE de Carabineros.  Por cierto la Defensoría Penal Mapuche se opuso, aunque el recurso interpuesto fue desestimado por el tribunal.

Sabas Chahuán nombró a Francisco Ljubetic como fiscal con dedicación exclusiva para investigar este caso conforme la invocación de la Ley Antiterrorista dispuesta por el Gobierno. Piñera, junto a su ministro del Interior Andrés Chadwick y Luis Mayol de Agricultura, viajaron a la zona para entregar sus condolencias a los hijos y familiares del matrimonio calcinado por los violentistas.

Desde luego, como es habitual el Ejecutivo habló de aplicar todo el rigor de la ley, de perseguir a los responsables y las consabidas frases de circunstancia, que nadie en La Araucanía puede ni está en situación de creer porque las cosas sobrepasaron todo límite. Y ya soportaron mucho. Ochocientos atentados, casi ochenta camiones quemados, varios muertos, decenas de carabineros heridos, robo y usurpaciones.

Es una noticia que en la región de La Frontera ( con propiedad ese es su nombre ), que a nadie conmueve. Porque viven a diario el rotundo fracaso del Estado, del Gobierno, de la Justicia y de la policía atada de manos. Piñera anunció la creación de una Unidad Especializada para combatir el terrorismo, mientras algunos parlamentarios pedían decretar el Estado de Sitio. Pero con una Agencia Nacional de Inteligencia ANI, dedicada a los grandes temas globales - legítimos pero escasamente apropiados para el país, claramente -, quién aportará información, antecedentes, en fin, todo aquello que hace a una labor eficaz. Nadie.

Menos se podrá compartir que la Ley Antiterrorista surtirá el efecto que debiera porque para los jueces ultragarantistas, toda prueba es insuficiente y descartable. Ese es el proceder cotidiano. No hay justicia.

Y los parlamentarios que tardíamente entendieron - como Alberto Espina -, que estamos frente al asalto de bandas y comandos terroristas ¿ qué podrán decir hoy ?

Puestas así las cosas ¿ qué puede esperar de este gobierno la comunidad agredida y ferozmente atacada por elementos decididos ? NADA. De modo que a nadie extraña que la intervención de Sebastián PIñera frente a las ruinas humeantes de la propiedad del matrimonio sacrificado por los ideólogos terroristas, haya merecido algunas pifias de parte de los agricultores allí presentes. Como declaró una de las mujeres en el lugar : aquí faltan cojones.

No menos porque el rostro, tanto del ministro Chadwick como el de Piñera, no revelaron la conmoción por este crimen horroroso. Y es imperdonable la cobardía, la ausencia de convicciones, de voluntad y coraje para pacificar la IX Región.

DESPIERTACHILE.CL