DE LA ENU A LA NUEVA MAYORÍA: COMPLETAR LA OBRA DE ALLENDE.

En uno de los tantos viajes de la actual Presidenta Bachelet, le preguntaron qué pensaba del Gobierno de la UP, a lo cual ella respondió que su tarea era “completar la obra inconclusa de Allende”.

En esto la Presidenta y la Nueva Mayoría no nos engañan. Y esta semana han demostrado, en materia de educación, hasta qué punto ellos quieren “completar” uno de los proyectos inconclusos y simbólicos de Allende: la ENU.

¿Qué era la ENU?

Nada menos que un plan de enseñanza unificada que terminaba traspasando la educación a las manos del Estado socialista para que los niños de todo Chile fuesen instruidos de acuerdo al silabario y los engaños de Marx.

¿Qué pretende la Reforma Educacional?

Exactamente lo mismo. Y para alcanzar este fin, presentar al sostenedor particular subvencionado -que “lucra” (supremo pecado) enseñando- como un simple delincuente; y, a los padres de familia, transformarlos en meros ejecutores de las disposiciones ministeriales para la educación de sus hijos. Eso sí, todo esto con la promesa de que la enseñanza será enteramente gratuita.

Es decir, la gratuidad es la zanahoria para conseguir imponer el garrote vil de la enseñanza nacional unificada, la ENU.

Cabe entonces preguntarse por qué razón en su época este plan del socialismo no se pudo concretizar.

La respuesta es simple: tanto los padres de familia cuanto los estudiantes e incluso algunos representantes de la Iglesia de entonces se opusieron firmemente a su realización, obligando al Gobierno de la UP a retroceder para poder imponer el socialismo en otros campos de la vida nacional.

Hoy estamos en la misma disyuntiva. La única diferencia es que algunos padres de familia, sostenedores, estudiantes y muchos representantes de la Iglesia no parecen estar debidamente conscientes de lo que constituye esta Reforma Educacional.

Al igual que ayer, el futuro de la enseñanza libre y particular se juega ahora, mucho más que en las comisiones parlamentarias, en la capacidad de reacción de los principales afectados, o sea, en los padres de familia, en los sostenedores, en los estudiantes y en las autoridades de la Iglesia.

¿Responderán ellos a la altura de las necesidades?

Eso se verá en el futuro. Las marchas de protesta pacífica contra el Proyecto de Reforma educacional marcadas para este próximo día 11 de octubre nos mostrarán hasta qué punto hay conciencia del peligro de la total estatización de la enseñanza.

Protesta ahora contra este Proyecto.

credochile.cl